Muere el portero de la discoteca de Villava que se encontraba en coma tras ser agredido
Fue ingresado en la UCI con lesiones cerebrales tras una agresión al tratar de frenar una pelea
Carlos Amorín Lamas, el portero de la discoteca Totem en Villava que entró en coma al ser agredido por un cliente el pasado domingo, murió por graves lesiones cerebrales. Tras ser golpeado por un joven que ya se encuentra en prisión imputado por homicidio, fue llevado a la UCI del Hospital Universitario de Navarra.
Los sucesos ocurrieron la madrugada del domingo 26 de noviembre, cuando el portero de 42 años y originario de León se dispuso a parar una pelea en la puerta de la discoteca. En ese momento, recibió un puñetazo de C.C.M, de 27 años y nacionalidad colombiana, que lo hizo caer al suelo inconsciente y entrar en coma. El portero fue llevado de urgencia al Hospital Universitario de Navarra con graves lesiones en el cráneo y en el cerebro. Fue atendido por los profesionales del centro, pero dada la severas heridas, empeoró hasta fallecer este miércoles.
Carlos Amorín, padre de un hijo de 5 años y vecino de Pamplona, fundó la Asociación Foral de Porteros con el objetivo de promover la profesionalización del sector. El propio portero aseguraba que era hora de que las comunidades incluyesen regulaciones y “que no cualquiera pueda ser portero”. También subrayó sin tapujos la precariedad de las situaciones laborales en un gran número de casos, principalmente señalando los sueldos.
Sus amistades han resaltado su gran profesionalidad. "Era un gran amigo y compañero", ha comentado Jesús, uno de sus ex compañeros y amigos.
El agresor entró en prisión el martes como delito de homicidio de tentativa, pero tras la muerte de la víctima, trasciende a homicidio consumado, que se basa en penas de hasta 15 años.
