El sindicato agrario EHNE no comparte algunos puntos de la modificación del la orden foral que regula el uso del fuego en suelo no urbanizable que plantea el Gobierno de Navarra y ha considerado que "no son horas de más prohibiciones sino de recomendar acciones y, en última instancia y en coyunturas excepcionales, tomar decisiones acordes a la gravedad de la situación".
Así, el sindicato ha opinado que "prohibir cosechar a partir de una hora después del ocaso es un despropósito". "Si nos atenemos a las temperaturas, es de noche cuando se da un riesgo menor para cosechar, con respecto al día", ha apuntado en una nota.
Tampoco comparte "la obligación de tener que dejar de cosechar si existe aviso amarillo". "Visto el proceso de cambio climático existente, en menos de una década se verán reducidos a la mitad los días factibles para cosechar si se aplica dicho criterio. Y, se quiera o no, la cosecha hay que recogerla cuando el proceso natural de maduración obliga", ha destacado.
En cuanto a la obligación de crear cortafuegos "inmediatamente después de cosechar, caso de que el campo de cultivo esté al lado de una masa o terreno forestal", ha considerado que es una propuesta que "hay que debatir, puesto que ello supone tener que disponer de otra persona manejando un tractor, un coste añadido para estos tiempos en los que el sector ya se encuentra bastante maltrecho por los gastos que debe afrontar".
Por otro lado, EHNE ha criticado que el Gobierno de Navarra base su decisión de modificar esta normativa en la prevención de incendios forestales como el ocurrido el pasado verano en el Vedado de Eguaras originado "por la chispa de una cosechadora".
El sindicato agrario ha señalado que "desconocemos el histórico de incendios, pero analizando los tres últimos más graves en Navarra, sólo el último del Vedado de Eguaras fue como consecuencia de una chispa de una cosechadora. Sin embargo, tanto el acontecido en Bera y Lesaka, como el de Tafalla no se originaron por efecto de la actividad agrícola".
"Somos los primeros interesados en que no se produzcan incendios. Primero, porque pueden generar importantes pérdidas en la cosecha o incluso en la propia maquinaria. Y segundo, porque somos los primeros que tomamos parte en la extinción de los incendios, tal y como se hizo en el del Vedado de Eguaras", ha remarcado.