El hombre, de 61 años ofreció una tasa muy alta en alcohol, delictiva, de 1,02 mg/l en la prueba de etilometría
Este martes, a las doce menos veinte de la mañana, una patrulla de Policía Municipal de Pamplona atendió un siniestro consistente en una salida de vía en la carretera de Badostáin, en Mendillorri, con daños materiales del vehículo.
Lo curioso llegó cuando el conductor alegó a los agentes que no sabía que había pasado para perder el control del vehículo. Sin embargo, tras realizarse la prueba de etilometría se encontró la explicación más sencillas: iba muy ebrio.
En concreto el hombre ofreció una tasa más que delictiva, de 1,02 mg/l en la prueba de etilometría.