La consejera de Desarrollo Rural y Medio Ambiente del Gobierno foral, Itziar Gómez, y los miembros de la comisión correspondiente del Parlamento de Navarra han visitado Funes para conocer de primera mano los objetivos de la Estrategia Ebro Resilience.
La Estrategia Ebro Resilience, como parte del Plan de Gestión del Riesgo de Inundación de la cuenca del Ebro, tiene por finalidad reducir el impacto de las inundaciones, contribuyendo a mejorar el estado de las masas de agua y los hábitats riparios en un territorio que abarca 325 km del río Ebro y discurre por 62 términos municipales de La Rioja, Navarra y Aragón. Para ello, incluye medidas de prevención, protección, preparación y recuperación ante inundaciones, así como de mejora de los ecosistemas fluviales, ha informado el Ejecutivo.
Actualmente en Navarra, en relación a la estrategia Ebro Resilience, se están llevando a cabo trabajos de eliminación de vegetación exótica en municipios como Tudela, entre otros, así como las obras de adecuación morfológica y restauración ambiental del Ebro en el paraje de El Ortigoso, en Milagro, con un presupuesto de 1,4 millones de euros. Durante estos trabajos se recuperarán 12 hectáreas de espacio fluvial, actualmente ocupado por choperas productivas y otros cultivos, y se restaurarán ambientalmente mediante la plantación de 21.000 ejemplares de plantas autóctonas.
En la visita, organizada por el Departamento de Desarrollo Rural y Medio Ambiente en colaboración con la sociedad pública Gestión Ambiental de Navarra (GAN), personal técnico de la Confederación Hidrográfica del Ebro (CHE), de la empresa pública estatal Tecnologías y Servicios Agrarios, SA (TRAGSA), y el Ayuntamiento de Funes), los parlamentarios han conocido también las intervenciones puestas ya en marcha en estos momentos y las previstas a corto plazo en el marco del proyecto LIFE Ebro Resilience.
ACTUACIONES LIFE EBRO RESILIENCE
En concreto, el proyecto LIFE Ebro Resilience P1 desarrolla tres actuaciones de la Estrategia con financiación del Programa LIFE de la Unión Europea. Estas intervenciones se localizan en Alfaro (La Rioja), Castejón (Navarra) y, en Aragón, en Fuentes de Ebro y Osera de Ebro. En el tramo riojano-navarro se recuperarán tres meandros del río Ebro actualmente desconectados del cauce como espacio fluvial, facilitando el desagüe de las crecidas y creando 45 hectáreas de hábitats fluviales. Con ello se mejorará el riesgo de inundación en 500 hectáreas de fincas agrícolas.
Como ejemplo y acción piloto para las intervenciones previstas, que aúnan gestión del riesgo de inundación y restauración fluvial, los parlamentarios han visitado las obras de la fase 3 del proyecto para la conexión hidrológica y mejora de hábitats en los meandros del tramo bajo del río Arga, en Funes. Las fases 1 y 2 se centraron en mejorar la calidad de las aguas en el meandro de Soto Sardillas, en la recuperación de la llanura de inundación y en la mejora de la confluencia de los ríos Arga y Aragón, permitiendo la salida conjunta de ambos ríos hacia el Ebro. Esta fase 3 se centra ahora en la reconexión entre el cauce del Arga y el meandro de Soto Sardillas, recuperando la continuidad longitudinal en el propio meandro y mejorando el riesgo de inundación de la localidad de Funes.
Esta tercera fase de las obras cuenta con un presupuesto de 3,9 millones de euros, que se suman a los 8,3 millones ya invertidos en las dos fases anteriores. La intervención en ejecución consiste en la reconexión entre el río Arga y el meandro de Soto Sardillas con la construcción de un canal naturalizado entre ambos cauces de 370 metros de longitud que discurrirá junto al polígono industrial de Funes. Esta conexión permitirá que, en crecidas a partir de 300 m3/s, el agua del río circule por el meandro de Soto Sardillas, saneando las aguas y reconectando ambos cauces.
Junto con la construcción de este cauce, los trabajos recuperarán la continuidad longitudinal del meandro, permeabilizando los obstáculos existentes en la actualidad para facilitar la circulación de las aguas. Durante las obras se construirán dos puentes nuevos, uno a la entrada del nuevo canal y otro para facilitar la entrada y salida del polígono industrial hacia la carretera NA-6630. Estos puentes se construirán mediante marcos de hormigón prefabricado de cinco metros de altura, ha indicado el Gobierno.
También se demolerá el actual paso hacia la EDAR del bajo Arga, junto al polígono industrial del Cubo, y será sustituido por un puente de la misma tipología que los anteriores. Finalmente, se construirá un nuevo azud de Las Mesicas que permita el paso del caudal derivado sobre su coronación.
En avenidas extraordinarias en el río Arga, cuando las aguas desborden la canalización actual por margen izquierda, como sucedió el pasado diciembre de 2021, el nuevo canal recogerá las aguas desbordadas y las reconducirá hacia el río Arga y hacia la confluencia con el Aragón, a través del meandro de Soto Sardillas, facilitando el drenaje y reduciendo el tiempo y la superficie de inundación.
Los trabajos ejecutados para la recuperación de los meandros del Arga han confirmado ya su eficacia, cumpliendo los objetivos de la actuación: la reducción del riesgo de inundación en el municipio de Funes y la mejora de hábitats que han permitido devolver al río unas condiciones cercanas a las naturales. Además, la renaturalización se ha realizado de forma compatible con los usos agrícolas.
Las obras son promovidas por el Ministerio para la Transición Ecológica y el Reto Demográfico, a través de la CHE, y se financian con cargo al Plan de Impulso al Medio Ambiente para la Adaptación al Cambio Climático, PIMA Adapta. El Ayuntamiento de Funes colabora poniendo a disposición parte de los terrenos necesarios para las obras, y el Gobierno de Navarra compensa al consistorio por corta prematura de chopos y realiza el seguimiento ambiental de los trabajos a través de la empresa pública GAN.
EFICACIA DE LAS MEDIDAS
Los trabajos ejecutados para la recuperación de los meandros del Arga han confirmado ya su eficacia, cumpliendo los objetivos de la actuación: la reducción del riesgo de inundación en el municipio de Funes y la mejora de hábitats que han permitido devolver al río unas condiciones cercanas a las naturales. Además, la renaturalización se ha realizado de forma compatible con los cultivos agrícolas.
Por otra parte, los humedales que se han creado y los brazos que conectan el meandro de Soto Sardillas con el río Arga, se han convertido en una zona de hábitats fluviales apropiados para la presencia de visón europeo, uno de los mamíferos más amenazado por extinción en Europa, ha expuesto el Gobierno.
También se ha hallado una colonia de más de 200 ejemplares de náyades autóctonas del Ebro en el meandro de Soto Sardillas.