La "isla tranquila", como se conoce popularmente a Fuerteventura, es una de las más desconocidas del archipiélago canario
Pamplona/Iruña, 11 de diciembre de 2017
Las Islas Canarias están de moda y van camino de batir un récord de visitantes. A lo largo del 2017, la cifra mensual de turistas no ha bajado del millón, lo que permite aventurar un final de año globalmente favorable. Según los cálculos realizados por AENA, en estos 12 meses habrán visitado las islas cerca de 16 millones de turistas. Algunos lo harán en fin de año, aprovechando el clima de "eterna primavera" que ofrece el archipiélago.
La mayor parte de viajeros, tanto españoles como extranjeros, tiene como destino las islas de Tenerife y Gran Canaria. A continuación se sitúa Lanzarote y en cuarto lugar del ranking, por delante de La Palma, Gomera y Hierro, encontramos la isla de Fuerteventura.
Fuerteventura, un paraíso para el descanso
La "isla tranquila", como se conoce popularmente a Fuerteventura, es una de las más desconocidas del archipiélago canario. Aunque el volumen de visitantes ha ido creciendo en los últimos años hasta alcanzar la cifra de 3,2 millones de turistas en 2016, Fuerteventura mantiene su espíritu de calma. Allí van a parar un buen número de británicos y alemanes que huyen de las aglomeraciones y que buscan en la isla un lugar de reposo para recargar energías.
Las infraestructuras hoteleras favorecen y potencian ese espíritu de tranquilidad. Un ejemplo son los hoteles todo incluido de Fuerteventura, que permiten disfrutar de todas las comodidades sin necesidad de abandonar el recinto. Algunos de ellos están diseñados especialmente para adultos; disponen de sauna, spa, restaurantes y acceso directo a la playa. Además, cuentan con un completo programa de actividades para amenizar la estancia.
Punto de encuentro para windsurfistas
¿Y qué se puede hacer en Fuerteventura además de descansar? La isla cuenta con 150 km de playas de arena blanca y es uno de los lugares preferidos para practicar el windsurf. Los frecuentes vientos alisios y las temperaturas suaves todo el año atraen miles de aficionados a este deporte.
Una de las zonas más favorables para navegar es Corralejo, al norte de la isla. Allí, en el canal que forman Lanzarote, Formentera y Los Lobos, se crean unos vientos muy favorables para todas las categorías de windsurf, desde principiantes hasta slalom o Freestyle. Otros puntos muy concurridos son Costa Calma y la playa de Sotavento, en el sur, que acoge cada año competiciones internacionales.
Paisajes volcánicos y dunas
Uno de las primeras imágenes que se vislumbran desde el avión al acercarse al aeropuerto de Rosario es la zona de Dunas de Corralejo. El paisaje es impresionante y vale la pena detenerse con el coche para tomar unas fotos y pisar la arena. Corralejo es una población con mucho encanto y una variada oferta gastronómica. Desde allí parten los ferris con destino a Playa Blanca, en Lanzarote; el trayecto entre las dos islas dura unos 20 minutos en transporte rápido.
Entre Corralejo y el extremo sur de la isla existe una distancia de 142 km. El interior es volcánico en un 80%, muy parecido a Lanzarote, pero pueden encontrarse palmeras y algunas zonas verdes en la parte sur. Las playas son en su mayoría de arena blanca y contrastan con las aguas azul turquesa del mar. En cuanto a la gastronomía, destaca el queso de cabra y la variada pesca local.
