Agentes de la Policía Foral, adscritos al Grupo de Investigación Medioambiental, investigan a un varón por un presunto delito de tenencia de armas prohibidas, al utilizar un dispositivo ilegal para la caza de topos en una localidad de Baztán. La actuación se produjo cuando la patrulla sorprendió al investigado preparando un cartucho de mostacilla en una finca colindante a la carretera.
El uso de este tipo de mecanismos sin autorización está prohibido en Navarra por la LF 17/05 de caza y pesca (el topo está considerado en Navarra como especie plaga dentro de la fauna silvestre y la normativa foral regula las medidas para su eliminación, permitiendo su captura mediante el uso de trampas tipo pinza, no con cartuchos). Estos dispositivos tienen origen en una patente francesa, de la cual Policía Foral ha detectado diversas copias artesanales. Disparan cartuchos provocando la muerte del animal por efecto de la onda de choque que genera el propio disparo. También son utilizados con cartuchos de caza del calibre 12 con proyectiles -llamados de mostacilla- que se emplean para cazar aves y otros animales pequeños.
Cuando el topo sale de la topera sobre la que se ha colocado el dispositivo, entra en contacto con el mismo, activándolo y provocando el disparo del cartucho sobre el animal. El mecanismo es muy sensible y con leves vibraciones es capaz de disparar, hecho que supone un riesgo para las personas que no conozcan tal artilugio y entren en contacto con él, incluso para los mismos agentes que se disponen a desactivarlo. La tenencia y uso de este tipo de munición para cazar resulta altamente peligrosa debido a la tendencia de dispersión de los proyectiles al dispararse, llegando a producirse rebotes que pueden alcanzar amplias distancias con trayectoria errática.
En lo que va de año es el segundo investigado por Policía Foral por hechos de similar naturaleza. El pasado mes de mayo se investigó otro varón en la comarca del Urumea y en ambos casos se informa al juzgado y a la Fiscalía de Medio Ambiente de Navarra.