Teherán ha denominado la operación como "Promesa Verdadera", argumentando que es en respuesta a la muerte de varios comandantes de la Guardia Revolucionaria en un ataque aéreo israelí en Damasco el pasado 1 de abril. El resultado de este ataque sin precedentes por parte de Irán determinará la intensidad de la respuesta de su gran enemigo, en una dinámica impensable hace unos meses entre dos países que mantenían un enfrentamiento intenso pero indirecto y en la sombra.
"La respuesta será significativa", advierten fuentes israelíes citadas por medios locales, quienes además informaron que su país neutralizó 100 misiles balísticos iraníes. Una niña beduina israelí resultó herida en el desierto del Néguev, mientras que un misil impactó en una base de la Fuerza Aérea en el sur del país, causando "daños menores", según el Ejército.
Los sistemas defensivos israelíes, que ya habían sido activados ante los 16.000 proyectiles y drones lanzados desde varios frentes en los últimos 6 meses, monitorearon las oleadas de drones. A medianoche, al igual que los de Estados Unidos, comenzaron a derribar algunos en la zona de Siria e Iraq. El escudo defensivo israelí, compuesto por varias capas, junto con los sistemas estadounidenses, jordanos y británicos en la región, lograron neutralizar los diferentes tipos de recursos empleados por Irán.
A la 1:42, las sirenas antiaéreas sonaron durante 15 minutos en prácticamente todo Israel, con numerosas explosiones derivadas de las interceptaciones a cargo del amplio sistema defensivo del Ejército.
"Hace poco, Irán lanzó aparatos no tripulados, drones asesinos desde su territorio contra el territorio del Estado de Israel", anunció el portavoz del Ejército, Daniel Hagari, quien en un intento de calmar a su población señaló: "El sistema defensivo antiaéreo se encuentra en máxima alerta y al mismo tiempo los cazas de combate y buques de la Fuerza Naval se encuentran ahora en misión defensiva".
El Consejo de Seguridad de la ONU celebrará una reunión de emergencia
El Consejo de Seguridad de la ONU se reunirá el domingo para una reunión de emergencia sobre el ataque con aviones no tripulados y misiles de Irán contra Israel, dijo el presidente del organismo.
La reunión fue solicitada por Israel, que escribió en una carta a la presidenta del consejo, Vanessa Frazier, que los ataques "representan una grave amenaza a la paz y la seguridad internacionales".
La carta acusa a Irán de violar sus obligaciones internacionales y de ser "el arquitecto de la inestabilidad durante años" por su apoyo a Hamás en Gaza, a Hezbolá en el Líbano y a los hutíes en Yemen.
"La gravedad y el volumen de los ataques no tienen precedentes", añade la carta, "y son una violación flagrante de la soberanía de Israel, del derecho internacional y de las resoluciones del Consejo de Seguridad".
Pide al Consejo de Seguridad que designe al Cuerpo de la Guardia Revolucionaria Islámica -la principal rama de las fuerzas armadas iraníes- como organización terrorista.
En una carta separada a Frazier, Irán se defendió diciendo que actuó en "autodefensa como se describe en el Artículo 51 de la Carta de las Naciones Unidas, y en respuesta a la recurrente agresión militar de Israel".
