El 27 de septiembre de 2019, 10 días después de ser condenada e inhabilitada por reconocer haber pertenecido al “frente de cárceles” de ETA, Amaia Izco entregó su acta de concejala por EH Bildu en el Ayuntamiento de Pamplona. Apenas cinco años después, el pasado 29 de octubre, el mismo Consistorio, apoyado por el partido de Izco, con sus socios de gobierno municipal Geroa Bai y Contigo-Zurekin, además del PSN y del PP -UPN se abstuvo-, acordó otorgar una subvención nominativa a la Fundación Víctimas del Terrorismo (FVT) de 3.000 euros. El partido que aupó a una reconocida colaboradora de ETA ofreciendo ayuda a las víctimas. Debe ser parte de ese “recorrido ético” que decía Eneko Andueza (PSE) que tenía Bildu por delante y que parece que se completa más rápido de lo previsto.
No está de más recordar que esa misma ayuda concedida en octubre también se aprobó -por unanimidad- el 28 de diciembre de 2023. Minutos antes de desalojar de la alcaldía a Cristina Ibarrola (UPN). Pero aquella subvención no se ha llegado a ejecutar en todo este año. Entonces la presentó UPN y esta vez ha sido a propuesta del PSN. Resulta curioso el interés de los socialistas -fuera del gobierno municipal- en sacar adelante esta iniciativa. Y, más aún, la capacidad de querer distribuir dinero que no le corresponde. Incluso con el rechazo del primer destinatario, reaccionando rápidamente para cambiar de beneficiario. Con nota de prensa incluída para “lamentar el rechazo de la FVT” a la vez que anunciaban que “los fondos irán destinados a Covite”. Como si de una competición se tratase y ellos fuesen los jueces.
Pero nada más lejos de la realidad y de ningún juego: porque nuevamente han vuelto a traficar verbalmente con las víctimas del terrorismo para interés propio. Mientras siguen criticando el uso político de éstas por parte de unos partidos políticos, los “discípulos de Sánchez” se arrogan la autoridad moral de hacerlo con más derecho que nadie. Y que se vea bien claro que ellos apoyan incondicionalmente a las víctimas. Que lo de aupar a Joseba Asirón a la alcaldía de Pamplona fue por el progreso de la ciudad y por el bien de todos. Por poner su granito de arena en el “recorrido ético”, debe ser. Ahora están todos con las víctimas.
Entiéndase la ironía, claro. Porque si algo se constata es que la imagen del PSN es pura fachada. Que parezca que su voluntad es buena: “El propósito de la enmienda era respaldar fundaciones y colectivos cuyo trabajo incide directamente en la reparación moral y social de las víctimas”, dicen. Y suena bien, aunque su única pretensión real sea un lavado de cara en toda regla. El blanqueamiento de los blanqueadores de etarras. Que por encima de “a quién”, quede el que ellos quieren ofrecer ese dinero para reparación de las víctimas.
Por si alguien lo ha olvidado, conviene recordar que Bildu sigue justificando y sin condenar los asesinatos de nuestros familiares, aquellos que fueron puestos en la diana como estrategia de agresión al país al que hoy siguen atacando, sin renegar de su pasado violento. Pero en esa nueva estrategia -ahora sin asesinatos-, Navarra y su identidad siguen encima de la mesa en lugar prioritario. Y además, ahora, con el PSOE de colaborador necesario, pretenden utilizar fondos de los propios navarros para dar una limosna y así participar de esa estrategia y blanquear su pasado.
Hablamos de 3.000 euros. El chocolate del loro. Que parece que son la solución a todos los problemas. Si bien el dinero es importante para llevar a cabo acciones de sensibilización, de educación y de memoria, creemos que es una inversión mucho más rentable la pedagogía de rechazarlo por las circunstancias en las que se ofrece. Porque el dinero no es de Bildu ni del PSN, es de todos los ciudadanos de Pamplona. Pero ese valor pedagógico que decimos es de renuncia ante Bildu mientras siga sin dar los pasos necesarios; y es de renuncia ante el PSN por su actitud falsa e interesada.
Aunque no en el patronato, Anvite forma parte de la Fundación Victimas del Terrorismo. Huelga decir que nuestro voto hubiera sido negativo también a recibir esa subvención. Hubiéramos unido nuestro voto al de la mayoría de asociaciones y fundaciones de víctimas del terrorismo representadas en ese patronato. Porque, como hemos señalado, el dinero no sale del bolsillo de los etarras, pero sí entendemos que queda ensuciado por las manos que lo quieren entregar. Sinceramente, más que una insignificante aportación económica, sería de mucha más ayuda la colaboración por parte de todo el entorno etarra en esclarecer los atentados aún sin resolver.
Junta directiva de Anvite
Pilar Ollo Luri, Julio Vidaurre Ruiz, Paz Prieto Sáenz de Tejada, José Ignacio Toca López de Torre, María José Moral García , y Luis Álvarez Atarés