Este miércoles por la mañana, la Plaza del Castillo de Pamplona ha sido escenario de una concentración convocada por la Plataforma de Afectados por la Hipoteca (PAH) bajo el lema: «Basta de desahucios, basta de rapiña. Fred y familia se quedan». El acto ha tenido lugar frente a la sede del Banco Santander para denunciar el posible desahucio de Fred, un vecino de Berriozar que, tras años de lucha por mantener su vivienda, enfrenta la pérdida de su hogar.
Fred, de origen nigeriano, llegó a España en el año 2000 y, desde 2003, reside en Berriozar, donde obtuvo la nacionalidad española. En 2006 adquirió una vivienda en la calle Zortziko mediante un préstamo hipotecario de 179.000 euros concedido por UCI, una entidad de crédito participada por el Banco Santander. Lo que comenzó como una cuota mensual de 600 euros pronto se disparó hasta alcanzar los 1.150 euros en 2008, haciendo insostenible el pago.
El relato de Fred refleja una vida de esfuerzo continuo, marcada por trabajos eventuales en un mercado laboral precario y la necesidad de enviar recursos económicos a su familia en Níger. A pesar de todo, Fred ha intentado cumplir con sus compromisos hipotecarios, negociando periodos de carencia y buscando acuerdos. Sin embargo, en una de estas negociaciones, asegura haber sido engañado para firmar un préstamo personal de 20.000 euros, que agravó aún más su situación económica.
Según la PAH, el banco ha obtenido de Fred decenas de miles de euros a lo largo de los años y ahora pretende desahuciarlo sin ofrecer una alternativa viable, como la dación en pago o el alquiler social. La familia de Fred, compuesta por su esposa y dos hijos, de 20 y 4 años, enfrenta la posibilidad de quedarse sin un techo, lo que, según los organizadores de la protesta, constituye una «muerte social».
Durante la concentración, los portavoces de la PAH han denunciado la «asfixia económica» ejercida por las entidades financieras y han señalado la responsabilidad de las administraciones públicas en permitir el agravamiento de la crisis habitacional. Asimismo, han exigido una legislación que garantice el derecho a la vivienda por encima de los intereses especulativos de la banca.
«Fred y familia se quedan» ha sido el mensaje unánime de los asistentes, quienes han advertido que esta no será la última protesta. Desde la PAH han anunciado que continuarán con concentraciones frente al Banco Santander y las instituciones implicadas en lo que consideran una vulneración del derecho a la vivienda.
La lucha por evitar el desahucio de Fred se convierte en un ejemplo más de las dificultades que enfrentan miles de personas en España debido a la crisis habitacional y las políticas financieras. La movilización ciudadana sigue siendo clave para visibilizar estas situaciones y exigir soluciones reales.
