Este jueves, Médicos del Mundo Navarra ha comparecido ante la Comisión de Salud del Parlamento de Navarra para exponer las conclusiones de su Informe Alternativo sobre las vulneraciones y barreras de acceso a la salud en Navarra. Este documento, fruto de una investigación exhaustiva apoyada por el Departamento de Memoria y Convivencia, Acción Exterior y Euskera del Gobierno de Navarra, revela los graves obstáculos que limitan el acceso a la atención sanitaria de colectivos vulnerabilizados, como personas migrantes, mujeres en situación de prostitución o víctimas de mutilación genital femenina, entre otros.
El informe se presenta en un momento crucial, justo tras del cierre del proceso de consulta y aprobación de la nueva Ley Foral de Salud, cuya aprobación definitiva está prevista para el próximo febrero. Una oportunidad histórica para establecer un sistema sanitario verdaderamente universal y equitativo.
Las barreras a la salud en Navarra
La exclusión sanitaria de los colectivos más vulnerables en Navarra tiene su origen en múltiples barreras estructurales, según el informe presentado por Médicos del Mundo Navarra. Entre ellas, las barreras administrativas emergen como una de las más significativas. Requisitos como el empadronamiento o la obtención de documentos complejos, como el certificado de "no exportación del derecho a la asistencia sanitaria", dificultan el acceso al sistema sanitario público, dejando a muchas personas fuera del alcance de servicios básicos de salud.
Las barreras culturales y lingüísticas también desempeñan un papel crucial en esta exclusión. El escaso uso de los servicios de traducción e interpretación en los centros de salud y la ausencia de mediación cultural agravan la situación de personas migrantes y minorías como la población gitana rumana. Además, la discriminación basada en el origen étnico o el estatus socioeconómico sigue siendo un problema significativo, que impacta directamente en la calidad y accesibilidad de los servicios sanitarios.
Por otro lado, las barreras físicas limitan especialmente a las personas que viven en zonas rurales. La lejanía de los centros de salud, combinada con la falta de transporte público adecuado, hace que el acceso a una atención sanitaria oportuna sea prácticamente imposible para estos colectivos. Esta situación perpetúa la desigualdad, sobre todo entre aquellos que ya enfrentan condiciones de vulnerabilidad extrema.
A estas dificultades se suman las barreras económicas, que afectan particularmente a quienes carecen de recursos para cubrir los costos asociados a la atención médica. En algunos casos, personas en situaciones de urgencia han recibido facturas por los servicios prestados, un acto que contraviene el principio de acceso universal a la salud y agudiza las condiciones de precariedad de las familias más necesitadas.
En su intervención ante la Comisión de Salud del Parlamento de Navarra, Médicos del Mundo Navarra subrayó la urgencia de implementar soluciones concretas. Entre sus propuestas, destacó la necesidad de simplificar los trámites administrativos, eliminando la exigencia de empadronamiento como requisito para acceder a la atención sanitaria. Además, instó a garantizar servicios de traducción y mediación cultural, junto con la capacitación del personal sanitario en normativas de derechos humanos y acceso equitativo.
También se hizo énfasis en fortalecer la Atención Primaria, asegurando recursos suficientes para atender adecuadamente a la población más vulnerable. Asimismo, se destacó la importancia de mejorar la accesibilidad física a los centros de salud mediante un transporte público adecuado, y se insistió en la suspensión de facturas en casos de urgencia para colectivos vulnerabilizados. Estas medidas, según la organización, son esenciales para construir un sistema sanitario verdaderamente universal e inclusivo.
"El derecho a la salud es un derecho fundamental que debe ser garantizado para todas las personas, sin importar su situación administrativa, origen étnico o condición socioeconómica," subrayaron desde Médicos del Mundo Navarra durante la comparecencia. La organización enfatizó que, sin medidas concretas y efectivas, las desigualdades detectadas seguirán perpetuándose, afectando a los colectivos más vulnerables de la Comunidad Foral.
La asociación espera que este informe se convierta en una herramienta clave para la elaboración de políticas públicas en salud, asegurando que las voces de las personas vulnerabilizadas sean escuchadas y que sus derechos sean protegidos, respetados y garantizados.