La Guardia Civil los habrían detenido por orden de la Audiencia Nacional para evitar un caso ‘Valtonyc’
Esta martes, cuatro de los cinco jóvenes que permanecían en libertad provisional y condenados por el ‘caso Alsasua’ han sido detenidos por orden de la Audiencia Nacional. Según señalan varios medios la intención de los magistrados de la Audiencia seria evitar riesgo de fuga como lo ocurrido recientemente con el rapero ‘Valtonyc’. Los detenidos son Jon Ander Cob, Aratz Urrizola, Iñaki Abad y Julen Goikoetxea, mientras que la quinta, Ainara Urkijo, no ha sido detenida.
La sentencia ha causado mucho malestar en Navarra y en Alsasua, donde familiares han anunciado una manifestación para el próximo 16 de junio. Como se recordará, tres de los acusados permanecen en prisión provisional desde su detención en octubre de 2016.
Hace unos días, el pasado viernes se comunicó la sentencia que les condena a penas de cárcel de entre 2 y 13 años. La sentencia descarta delitos de terrorismo ya que considera”no ha quedado plenamente acreditado la finalidad terrorista de su acción y tampoco su vinculación o pertenencia a ETA”.
El tribunal considera probado que fue el acusado Jokin Unamuno, condenado a 12 años de prisión, quien inició los actos de hostigamiento a los dos guardias civiles y sus novias, secundado por Ohian Arnanz, condenado a 13 años de prisión, y Jon Ander Cob, condenado a 9 años de cárcel. También resultan condenados a 9 años Julen Goicoechea y Aratz Urrizola. Los otros dos restantes, Adur Ramírez a 12 años e Iñaki Abad a 13 años. Excepto Ainara Urquijo, que resulta condenada por delito de amenazas y desórdenes públicos a dos años de prisión, el resto de los acusados son condenados por los delitos de atentado a los Agentes de Autoridad y lesiones. En el caso de Abad y Arnanz se les condena también por desórdenes públicos.
Por vía de responsabilidad civil deberán indemnizar al teniente en 9.200 euros por lesiones; al sargento en 3.750 euros y a sus novias en 6.100 euros a cada una por las lesiones. Además, por las secuelas y daños morales, la Sala fija 45.000 euros para la novia del teniente y 25.000 euros para la novia del sargento.
El tribunal aprecia las agravantes de abuso de superioridad y de odio y considera probado que los acusados actuaron movidos por la animadversión y menosprecio hacia la Guardia Civil y por motivos claramente ideológicos pero entiende que no ha quedado plenamente acreditado la finalidad terrorista de su acción y tampoco su vinculación o pertenencia a ETA. No obstante, ante la gravedad de las conductas, la Sala impone las penas más altas previstas para estos delitos porque “no puede permitirse que en el siglo XXI, y en un Estado democrático y de derecho, se prive a unas personas, solamente porque tengan la condición de Guardias Civiles y a sus novias, de poder moverse en libertad por la localidad de Alsasua, y que solamente pueden acudir a determinados lugares y no pueden salir por la noche a pasar un rato de ocio y diversión”.