El Gerente de la Sinfónica de Navarra, adicto al lujo

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Florentino Briones es gerente de una orquesta que se financia en gran medida con dinero público

Pamplona, 8 de agosto

El Gerente de la Orquesta Sinfónica de Navarra, Florentino Briones, confiesa en un programa de televisión ser un adicto al lujo. Hoteles de lujo, o comidas en un restaurante tres estrellas de Michelín parecen ser, a tenor del programa,  las aficiones del Gerente de una orquesta que en los últimos tiempos está pasando por estrecheces económicas, y que en gran medida se financia gracias al presupuesto del Departamento de Cultura.

Además, como se recordará, los trabajadores de la Orquesta Sinfónica se declararon en huelga hace algunos meses por su precaria situación laboral. En sus denuncias, el comité de empresa de la Orquesta Sinfónica culpaba precisamente del empeoramiento de sus condiciones, y buscando la desaparición de su convenio a Briones que presume de lujo.

Las estrecheces con las que viven los trabajadores de su empresa poco parecen importar al Gerente Briones, dado que en el reportaje  se puede observar como presume de acudir habitualmente a un hotel con habitaciones que cuestan 400€ la noche, como las que existen  en el Hotel Marqués de Riscal en Elciego, un impresionante edificio diseñado por el arquitecto del Museo Guggenheim Bilbao es obra del arquitecto estadounidense Frank Gehry.

En otro momento del reportaje Briones acude junto al periodista de Antena 3 al restaurante del cocinero Pedro Subijana en San Sebastián, el Akelarre. Un restaurante que tiene tres estrella Michelín, y que cuenta con un menú degustación de 135€, donde hay bombones de aperitivo y gambas frescas de Huelva, entre otros platos gourmet.

El programa termina con una pregunta directa del reportero a Briones: “¿Te han llegado a cortar estos lujos en la actual situación de crisis?” a lo que el Gerente responde sin dudarlo:  “Que la gente que no está teniendo problemas por la crisis se tenga que sentir culpable por no tener problemas, no al contrario, si yo dejo el dinero guardado bajo el colchón dejo sin trabajo a los camareros de la cocina, a los del hotel que viven de la gente que va a esos sitios”.

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