El Lehendakari, Imanol Pradales, ha presidido este mediodía la 7ª edición del Día Internacional de la Diáspora Vasca, el acto institucional organizado por el Gobierno Vasco que, en esta ocasión, ha decidido celebrar en Oñati.
Con la elección de este municipio guipuzcoano, se ha querido rememorar y rendir homenaje al primer programa de estancia de alumnado y profesorado de la Universidad de Boise, en Idaho, que se desarrolló hace 50 años, en 1974, en la localidad. De hecho, una representación de ese grupo ha estado presente en el acto.
"El de hoy, es un día para estar contentos, porque hace 50 años llegó aquí un grupo de 90 personas. Un grupo de vascos y vascas impulsado por el profesor de Boise Pat Bieter. El objetivo era volver a su patria. Disfrutar de la cultura, aprender euskera. Y eso es lo que hicieron", ha recordado en su discurso el Lehendakari.
Y ha querido, asimismo, agradecer la valentía que mostraron en ese momento para emprender esa aventura que abrió un camino que permite "difundir la semilla del euskera cada día".
Pradales ha mencionado, además, que la diáspora vasca está celebrando este día en 15 países con más de un centenar de actos, "lo que refleja que este Día se está arraigando en ella", ha afirmado.
Así, Imanol Pradales también ha dedicado su discurso a otros vascos que tuvieron que irse a otros países, como Miguel Mari, del Valle de Baztán, que emigró a México y cuya historia conoció hace 26 años.
"No tenía muchas oportunidades a su alrededor. Un día, recibió una carta de un tío que unos años atrás había emigrado a México, en la que le contaba que allí sí había trabajo y le invitaba a ir y que le llenó de nerviosismo y vértigo", ha relatado el Lehendakari, y ha añadido que "ese fue el primer contacto que tuve con la diáspora vasca. Tuve claro que también somos un País migrante".
Con casos como el de Miguel Mari, que formó una familia y transmitió el euskera y la cultura vasca a sus hijos, Pradales ha puesto en valor la aportación que realizaron esos miles de vascos y vascas "que se convirtieron en nuestros embajadores", aseverando que "gracias a ellos, juntos y juntas, hemos llevado nuestra lengua y nuestra cultura a una nueva dimensión internacional, y, ahora, debemos dibujar todos juntos y juntas nuestra nueva relación, nuestra relación con la nueva diáspora".
Euskadi Global
Al hilo de esa afirmación, el Lehendakari se ha referido a los retos a los que se enfrenta el País.
"Nuestro País se juega muchísimo en el contexto internacional estos próximos años. Debemos tejer nuevas redes y conectar con nodos que aporten valor. Una estrategia global e internacional para que las y los vascos volvamos a surcar nuevos mares y mundos en busca de prosperidad para nuestro País. Hablo de una Euskadi Global", ha enfatizado Imanol Pradales.
Un objetivo en el que, ha subrayado, "es fundamental el papel de la diáspora vasca".
Así, Pradales se ha referido a "los cientos de vascas y vascos que salen al extranjero después de haber sido formados en nuestro País", quienes "también forman parte de nuestra red exterior y son un agente indispensable para nuestro progreso".
Importancia del acogimiento
Un discurso en el que, aludiendo al centro de primera acogida en el que desde hace unos años se ha convertido Larraña Etxea de Oñati, ha subrayado la importancia de acoger, porque "el pueblo vasco fue y sigue siendo acogido".
"Los nuevos retos piden nuevos roles, y, estoy convencido, la diáspora vasca continuará realizando su aportación indispensable. Porque fueron, somos y, porque somos, serán", ha concluido el Lehendakari.
Además del Lehendakari, entre otros representantes institucionales han acudido al acto la alcaldesa de Oñati, Izaro Elorza, los y las consejeros María Ubarretxena, Mikel Jauregi y Juan Ignacio Pérez, así como el Secretario General de Unión Europea y Acción Exterior del Gobierno Vasco, Ander Caballero, y el Director para la Comunidad Vasca en el Exterior, Gorka Álvarez.