La Asociación de Hoteles de Pamplona y la Asociación de Campings de Navarra han reclamado la realización de test de antígenos y la apertura del cierre perimetral de la Comunidad foral para «salvar» al sector.
En un comunicado, ambas asociaciones han pedido que se realicen test de antígenos tanto al personal propio de los establecimientos hoteleros como a los turistas y que el siguiente paso sea poner fin al cierre de Navarra para «ir retomando la actividad de uno de los sectores más afectados por la crisis y las restricciones».
Para las asociaciones de hoteles y campings de la Comunidad foral, el cierre perimetral de Navarra, las restricciones a la restauración y la ausencia de celebración de eventos son «los responsables de la aguda crisis que atraviesa el sector hotelero y de campings».
Ante esta situación, ambas entidades han destacado que la Asociación de Hostelería y Turismo de Navarra, marca que representa a ambas asociaciones (de hoteles y campings), «lleva meses manteniendo reuniones con el Gobierno foral para solicitar un rescate urgente» y para «trabajar de la mano en medidas que puedan beneficiar al sector siempre anteponiendo la salud y la seguridad».
«LLUEVE SOBRE MOJADO»
En concreto, desde la Asociación de Hoteles de Pamplona han remarcado que «llueve sobre mojado», de tal forma que «a un nefasto mes de octubre con descensos acumulados de la ocupación hotelera de un 50% respecto al mismo mes de 2019, le sigue un mes de noviembre cuyas previsiones vuelven a marcar un récord histórico negativo».
Así, la previsión de ocupación media para este mes es del 15% (en 2019 fue del 66%), lo que supone una caída del 78%. La estimación para diciembre es del 13% de ocupación hotelera, lo que supondrá un retroceso del 74% (en diciembre de 2019 se registró una ocupación del 48%).
Con todo, «el sector se está enfrentando a un desplome en la facturación entre marzo y noviembre del 67% respecto al mismo periodo de 2019».
Además, la asociación ha remarcado que «ya son seis los hoteles que se han visto obligados a cerrar temporalmente ante esta debacle, algunos incluso sin fecha fijada para su reapertura».
Según han indicado desde la asociación, «con las ocupaciones congeladas y enfrentando los meses más duros del año para muchas empresas es menos dañino estar cerradas que permanecer abiertas con ocupaciones tan residuales». Y han subrayado que «Las severas restricciones aplicadas al sector en forma de cierre perimetral de Navarra y el cierre de hostelería y restauración, hacen que el sector atraviese las horas más bajas que se recuerdan».
«A eso se suma la imposibilidad de celebrar eventos y banquetes en los hoteles, lo que ha supuesto su pososición generalizada», han agregado.
SITUACIÓN DE LOS CAMPIGNS
Por su parte, si bien el sector de los campings «no sido de los más damnificados durante el periodo estival, igualmente ha constatado una caída acumulada anual de su negocio de un 30% en 2020 con respecto a 2019».
A estos «malos» datos proporcionados por la Asociación de Campings de Navarra, se añade que «muchos de estos campings echan el cierre a partir de otoño y hasta la primavera no vuelven a abrir sus puertas», por lo que su «preocupación e incertidumbre para 2021 es muy notable».
Para hacer frente a la situación del sector, ambas asociaciones reclaman un «rescate urgente», que cuente con aplazamientos fiscales o la posibilidad de una normativa que reduzca el costo de los arrendamientos y su renegociación.
Igualmente, han apostado por la prolongación de los ERTE, la prórroga e introducción de un periodo de carencia en la devolución de los ICOs, la reducción del IVA o la exención de tasas de residuos.
Según han indicado, «estas medidas de rescate solicitado se complementan con otras propuestas realizadas desde la asociación, como la posibilidad de realizar test de antígenos a turistas y personal propio o la medición en CO2 een establecimientos en aras de la máxima seguridad de los clientes, siempre en el ámbito de trabajo de esa Mesa Técnica con Salud Pública en la que se espera colaborar en las próximas semanas».