El crimen se llevó a cabo tras una fuerte discusión entre Moisés Fernández, el homicida, y la familia de su pareja
Pamplona/Iruña, 7 de agosto de 2018
Moisés Fernández pasará este miércoles a disposición judicial por el crimen cometido este domingo en el que asesinó a su suegro, Juan Vázquez Cabral, de 60 años, tras una fuerte discusión familiar. Tras el crimen, el homicida se atrincheró en la vivienda durante cinco horas, hasta que el dispositivo especial de los GEO de la Policía Nacional consiguió entrar y detenerle.
Desde entonces Moisés Fernández se encuentra en dependencias policiales, y pasará a disposición judicial este miércoles, cuando prestará declaración. El detenido cuenta con numerosos antecedentes policiales, el último de ellos cometido el año pasado, cuando restregó las heces de su perro a un ciudadano que le recriminó que no las recogiese del suelo.
No obstante, Fernández no es el único miembro de su familia que ha resultado problemático, ya que su padre, tras matar de un disparo a su primera mujer en 1964, apareció asesinado a hachazos en su domicilio de la Rochapea en 1995, crimen por el que no hubo ningún detenido. Además, una de las hermanas de Moisés estuvo ocho años en la cárcel por un homicidio en defensa propia cometido en Barcelona.
El propio Moisés Fernández también había estado en prisión en varias ocasiones antes de cometer el crimen del domingo, y en su historial figuran numerosos delitos como robo con violencia, robo con fuerza en casa habitada, atentado, daños, lesiones imprudentes y contra la Administración. El último delito cometido antes del asesinato de su suegro fue el ocurrido en mayo de 2017, cuando restregó las heces de su perro a un ciudadano que le instó a recogerlas del suelo.
Los hechos del domingo dejaron al barrio de San Jorge conmocionado, aunque los vecinos de la zona conocían en mayor o menor medida el historial delictivo de Moisés, a quien definían como una persona conflictiva y con carácter violento. La calle Santa Vicenta María, donde ocurrió el crimen, seguía acordonada y con fuerte presencia policial durante la jornada del lunes, lo que atrajo a muchos curiosos a la zona.
Tanto amigos como vecinos de la víctima, muy impactados con el suceso, lamentaban lo ocurrido y aseguraban que el homicida "no debería haber salido de la cárcel" y que "no hay razón para matar a una persona, y menos de esa manera".
El titular del Juzgado de instrucción nº2 , encargado de la investigación del caso, ha decretado el secreto de sumario.








