Es fácil olvidarse de tu conexión a internet hasta que empieza a dar problemas, y pocas cosas generan tanto estrés y frustración como estar experimentando constantemente una mala conexión a Internet. A veces es normal pensar que es un fallo temporal, pero si tienes algunos de estos problemas con cierta constancia deberías tomar cartas en el asunto y solucionar el problema de raíz.
- Conexión con microcortes
No es un problema relacionado con la velocidad, pero sí con la estabilidad de tu conexión a Internet. Consiste en experimentar constantes parones con cierta frecuencia en la red Esto es algo que puede resultar molesto para una navegación normal, pero que se convierte en un problema muy frustrante si utilizas streaming o juegas a videojuegos.
2. No te llega toda la velocidad
Un problema habitual es que tu conexión tenga una velocidad de conexión inferior a la que tienes contratada. Puedes comprobar qué velocidad real te está llegando usando un test de velocidad. Es importante distinguir si la prueba la haces con un dispositivo conectado a red por ethernet o por wifi. En el primer caso es probable que tengas un problema de conexión y lo hables con tu compañía, en el segundo puede ser un problema del wifi por estar en una zona con problemas de cobertura o porque haya otros dispositivos utilizando la red en el mismo tiempo.
Te recomendamos que hagas pruebas con el test de velocidad y compruebes si te llega lo mismo con cable que con wifi o si en distintos puntos de tu casa u oficina cambia la velocidad.
3. No te cargan algunas páginas, juegos o aplicaciones
Si ves que en algunos casos experimentas problemas con aplicaciones y páginas concretas; es probable que el problema venga derivado del software, y no del hardware.
En primer lugar comprueba si tu firewall está bloqueando estas funciones o intenta mirar qué programas o drivers necesitas para ejecutar la aplicación que quieres abrir y verifica que tengas todos actualizados. Programas como java suelen dar problemas en ciertas páginas si no se actualizan.
Si el problema te da un mensaje de error, intenta hacer una búsqueda en Google; normalmente es algo que ya ha ocurrido a otros internautas y podrás encontrar información al respecto en ciertas páginas.
4. El lag: ping y latencia elevados
El ping es la manera de medir la latencia y también es un indicador de la latencia de tu conexión, representa el tiempo de respuesta entre un equipo local y uno remoto. Una latencia baja tendrá más inmediatez; si, por el contrario, tenemos un ping muy alto el tiempo de respuesta será lento.
En caso de uso normal de la conexión como puede ser navegar por la red o chatear, apenas tendrás problemas teniendo un ping y latencia relativamente altos; en el caso de videojuegos o de estar en una videoconferencia, la cosa cambia y a partir de ciertos niveles será inviable que puedas continuar con tu actividad.
Muchos factores pueden influir en la latencia, pero mejorar tu plan de red, no saturar la conexión (desconexión, vídeos, streaming... ) o usarlo en horas en las que no haya otros usuarios conectados podrán mejorar tu experiencia de navegación. En algunos casos solo podrás solucionarlo renovando tu hardware, router o en caso de ser muy antiguo, tu ordenador o teléfono móvil.
Mantener la calma, descartar posibilidades y asesorarte
Si detectas que, efectivamente, tienes error en tu conexión intenta ir descartando poco a poco posibles problemas para poder identificar en la medida de lo posible el problema. Es recomendable que si ves que no avanzas puedas asesorarte hablando con un técnico cualificado o con tu compañía de teléfono.







