Adacen insta a la población a llamar al 112 en el caso de sospecha de sufrir un ictus

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Participa mañana, Día Mundial del Ictus, en un webinar sobre ictus y COVID19

Organizado por el Complejo Hospitalario, Navarrabiomed y Adacen, mañana jueves 29 de octubre, se celebrará un webinar en el que profesionales del Complejo Hospitalario, de Atención Primaria, de Clínica Ubarmin y de Adacen informarán sobre cómo ha afectado la COVID-19 en el “proceso ictus” en Navarra. Debido al descenso de las llamadas a urgencias por este motivo durante el confinamiento, Adacen quiere recordar a la población la importancia de llamar inmediatamente al 112 en el caso de sospecha de sufrir un ictus.

Durante el confinamiento iniciado a partir de la declaración del primer estado de alarma el pasado 16 de marzo, el Complejo Hospitalario de Navarra (CHN) recibió un 25% menos de pacientes con sospecha de ictus respecto a las cifras del año anterior. Estos datos son similares a los observados en otros centros nacionales. 

Nuria Aymerich Soler, neuróloga de la Unidad de Ictus del CHN señala que “nuestra impresión es que ante los ictus que debutaban con mayor afectación o gravedad se siguió avisando al 112 y pudieron acceder al tratamiento adecuado. Sin embargo, ictus con síntomas más leves o transitorios (a veces potencialmente muy graves…) no accedían a los servicios de urgencias, probablemente por miedo al contagio”. 

Esta situación, sobre la que quiere alertar Adacen, es muy preocupante puesto que en el caso del ictus es esencial la atención sanitaria urgente para la recuperación. “Se pierde la oportunidad de que, si se cumplen unos determinados requisitos que se valoran a la llegada del paciente a urgencias, se puedan administrar los tratamientos adecuados demostrados como eficaces para disminuir las secuelas del ictus. Uno de los principales requisitos es la llegada a urgencias cuanto antes desde el inicio de los síntomas porque el tratamiento es más eficaz cuanto antes se administre”, alerta Nuria.

“Incluso si el paciente acude a urgencias pero no es candidato a estos tratamientos (no cumple los requisitos para que sean eficaces y seguros), también se beneficia por su ingreso en la Unidad de Ictus ya que los cuidados en esta Unidad se han demostrado muy eficaces para la evolución positiva de los pacientes. Además, estas personas se benefician del inicio temprano de tratamiento rehabilitador durante su estancia hospitalaria y posteriormente en Clínica Ubarmin o en el Hospital San Juan de Dios”, concluye.  

Por todo ello, desde Adacen quieren recordar a la ciudadanía que es esencial llamar al 112 con la mayor brevedad ante cualquier sospecha de ictus. 

Los síntomas que indican que una persona podría estar sufriendo un ictus son: 

  • Dolor de cabeza intenso, de inicio brusco y distinto del habitual.
  • Pérdida de fuerza, sensibilidad o disminución de la coordinación en la mitad del cuerpo. 
  • Pérdida total o parcial de la visión o visión borrosa.
  • Pérdida de sensibilidad en la mitad de la cara
  • Dificultad para hablar o para entender cuando te hablan. 

Ante la situación actual y con el objetivo de que la ciudadanía aprenda a detectar un ictus y a reaccionar con celeridad, Adacen va a extender su campaña “¿Sabrías distinguir un ictus?”  iniciada hace dos años en las empresas con la colaboración de Mutua Navarra, al resto de la población por diferentes canales. Varios estudios han puesto de manifiesto que más del 60% de la población no es capaz de identificar cuando una persona que se encuentre a su lado está sufriendo un ictus y que menos de la mitad acudiría al hospital si se encontrase en una de estas situaciones.

Rehabilitación en tiempos de COVID-19 8

Los efectos de la pandemia se han visto reflejados también en la Rehabilitación de las personas con Daño Cerebral Adquirido, más evidentes en los más afectados tanto física como cognitivamente. 

Según el Dr. Santiago Martinez Gorostiaga, responsable del área de neurorrehabilitación de la Clínica de Ubarmin “inicialmente se resintió sobre todo la atención presencial de pacientes ambulatorios , tanto en consultas como en las áreas de terapia , aunque se mantuvieron algunas consultas presenciales y se aumentó la asistencia no presencial para asesorar , informar e indicar pautas, tareas y ejercicios que se podían hacer en domicilio, con el objetivo de empoderar a los pacientes y familiares en el proceso de rehabilitación para lograr la máxima recuperación posible con los medios y posibilidades disponibles . En los últimos meses se ha incrementado la atención presencial tanto en consultas como en las áreas de terapia y en el futuro es previsible una convivencia entre la atención presencial clásica y el desarrollo de la telerrehabilitación, aunque esto requerirá mejoras tecnológicas y cambios culturales“.

Por otro lado, las personas afectadas por daño cerebral adquirido, como es el caso de los usuarios y usuarias de Adacen, debido al cierre de los centros han sufrido la interrupción de los tratamientos rehabilitadores presenciales. Aunque la asociación ofreció rehabilitación a distancia mediante diferentes recursos on-line, se ha observado, en algunos casos, un empeoramiento de las facultades ligado también a un peor estado emocional y anímico. 

De todo esto se hablará en el webinar que se celebrará mañana a las 16:00 h en Navarrabiomed con motivo de la conmemoración del Día Mundial del Ictus. Además, se detallará cómo se han adaptado los recursos sanitarios y de Adacen a la situación actual para continuar atendiendo a pacientes, incluyendo todas las fases (desde la Atención Primaria y medidas de prevención hasta la atención hospitalaria, neurorrehabilitación y recursos sociosanitarios). Las inscripciones ser recogen en la web de NavarraBiomed.

¿Qué es el ictus?

Es la principal causa de DCA. Se produce por la interrupción, más o menos repentina, del flujo sanguíneo en una zona del cerebro. Se pierden las capacidades asociadas a la zona afectada, con unas consecuencias mortales en un 30% de los casos y de discapacidades graves en el 44% de las personas que sobreviven. 

Hay dos clases de ictus: los isquémicos, producidos por una obstrucción de vasos sanguíneos que impide el riego sanguíneo en una parte del cerebro; y los hemorrágicos, causados por la rotura de ramas arteriales y la consiguiente hemorragia cerebral. 

Según el informe de la investigadora Martha Quezada publicado en el Boletín del Observatorio Estatal de la Discapacidad, en España hay 420.064 personas con DCA, 329.544 a causa del ictus. Cerca del 54% son mujeres y un 46% hombres. El 25% son menores de 65 años. El 89% de estas personas presentan alguna discapacidad para las actividades básicas de la vida diaria, porcentajes que se reducen al recibir ayuda. 

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