El paseo está situado en el barrio de Camp Redó y se llamará carrer de Francesca Vidal, sindicalista del siglo XII
La decisión del Ayuntamiento de Palma de Mallorca de cambiar un nombre de un Pasaje titulado "Castillo de Olite" ha provocado la indignación en las redes sociales por parte de algunos navarros tras conocerse la noticia. La confusión ha sido importante ya que el nombre de dicho paseo no hacía referencia al castillo medieval navarro sino a un buque mercante, botado originalmente con el nombre de Zaandijk en Rótterdam, y que fue hundido por una de las baterías de defensa costera de Cartagena en los últimos días de la Guerra Civil Española. El barco en fue incorporado a la marina de Guerra por orden de 1 de noviembre de 1938 y quedó rebautizado como Castillo de Olite,4 nombre en referencia al Palacio Real de Olite.
Desde la redacción de Pamplona Actual pedimos disculpas por la confusión creada.
El paseo de marras está situado en el barrio de Camp Redó y se llamará carrer de Francesca Vidal, sindicalista del siglo XII.
Según ha apuntado el consistorio de Palma "los criterios adoptados para otorgar los nuevos nombres han sido la coherencia toponímica, recuperar la historia y los topónimos tradicionales y reivindicar el papel de las mujeres en la historia".
El alcalde de Palma ha explicado que "cambiamos el nombre de 12 calles con simbología franquista de nuestra ciudad para seguir avanzando en la democracia". "Todos los que estamos aquí presentes nunca pactaríamos con fascistas. Por eso seguimos cambiando nombres de calles, abriendo fosas e identificando los cuerpos para poder devolverlos a sus familias".
Para el concejal de Educación y Política Lingüística, "la Guerra Civil y la Dictadura fueron una página negra de nuestra historia, los cambios de nombre de calle no la harán olvidar, pero tampoco el exaltado más". El concejal de Participación Ciudadana y Gobierno Interior ha dicho que "este acto de normalidad democrática no puede suponer un coste económico para los autónomos o las empresas de estas calles, por tanto facilitaremos su adaptación. Por ello, por primera vez, daremos unas ayudas por valor de 40.000 euros para modificar los nombres en la documentación "
El secretario autonómico de Sectores Productivos y Memoria Democrática, Jesús Jurado, ha afirmado que "se borrar la herencia franquista de nuestras calles y de nuestra sociedad no sólo es una obligación legal, también es una obligación moral. Agradecemos el trabajo de la Ayuntamiento de Palma y seguiremos trabajando para que se sigan eliminando estos símbolos en beneficio de la sociedad ".
