Sin embargo, la solución adoptada no es la prevista en el vigente Plan de Carreteras de Navarra
Pamplona, 13 de agosto
La localidad navarra de Cintruénigo ya cuenta con una nueva glorieta en el cruce con la Nacional 113, un punto negro en las carreteras navarras, y un verdadero quebradero de cabeza para las autoridades locales que habían pedido la intervención del departamento de Fomento del Gobierno para solucionar la peligrosidad del cruce, con varios fallecidos en su haber.
Sin embargo, la solución adoptada no es la prevista en el vigente Plan de Carreteras de Navarra, un puente elevado sobre el cruce, sino una más barata, aunque según el Ejecutivo igualmente eficaz para eliminar este punto negro.
Esta mañana, el consejero de Fomento Zarraluqui ha comprobado la finalización de las obras de cierre de esta glorieta que se encontraba anteriormente partida por la carretera N-113 Pamplona-Madrid (p.k. 90+880), como solución de seguridad al cruce con la carretera NA-160 Tudela-Fitero (p.k. 15+750).
A este acto han asistido también el director general de Obras Públicas, Ignacio Nagore; la alcaldesa de Cintruénigo, Raquel Garbayo; el alcalde de Fitero, Francisco Javier Yanguas, y el presidente del Parlamento, Alberto Catalán, así como representantes municipales y miembros del Servicio de Conservación del Gobierno de Navarra.
Las obras, que comenzaron a principios del mes de junio, han tenido un coste de 245.475 € y han sido ejecutadas por la UTE Harinsa Navasfalt y Río Valle, adjudicataria del contrato de Conservación Integral de carreteras del Distrito de Tudela 2012-2015.
Esta nueva rotonda pretende evitar la siniestralidad de dicho cruce, en el que desde el inicio de 2012 se han registrado 11 accidentes con un saldo de 3 fallecidos y 4 heridos. La mayoría de las colisiones fueron frontolaterales, lo que indica que la principal causa es que no se respeta la prioridad de paso en la intersección.
En este sentido, Fomento ha considerado que la alternativa más eficaz para eliminar el peligro consiste en modificar la tipología de la intersección mediante el cierre de la glorieta partida, junto con otras como el reforzamiento de la señalización horizontal y vertical, balizamiento y sistemas de alerta.
La obra consiste en una glorieta circular cerrada, de 40 m. de diámetro interior, similar a las ejecutadas en el p.k. 72 de esta misma carretera para el acceso a la Autopista de Navarra AP-15, que garantiza el giro de vehículos pesados en condiciones de seguridad, con una anchura de 10 m. entre bordillos en la corona central. La parte interior de la glorieta se ha elevado para garantizar la evacuación de las aguas de escorrentía hacia el exterior y mejorar la rasante de los cuatro ramales que acceden a la misma.
