Jóvenes estudiantes del centro reciben formación de Lares y elaboran “Historias de Vida” junto a personas residentes. El curso termina con la presentación de lo aprendido con un documental, ante personas usuarias y trabajadoras de residencias de mayores.Para Lares Navarra, “este es el auténtico cambio cultural que requiere la ACP: que quienes están formándose lo hagan ya en el nuevo modelo”
El CI Escuela de Educadores - Hezitzaile Eskola II ha concluido el curso académico 2020-2021 con diversos proyectos sobre la Atención Centrada en la Persona (ACP), realizados en colaboración con la asociación Lares Navarra. El objetivo final es adaptar el currículo formativo del Grado de Atención a Personas en Situación de Dependencia (APSD) a las premisas del modelo ACP, Atención centrada en las personas. Una vez culminado este proceso, el CI Escuela de Educadoras-es, se convertirá en pionero, al ser la primera ocasión en la que un centro de estas características adapta su desarrollo curricular, pasando del modelo educativo convencional a los principios y metodologia de la ACP.
Como primera fase de esta colaboración, Lares Navarra impartió formación a los docentes y asesoró al alumnado en diversos proyectos relacionados con este modelo, abriendo sus centros residenciales a las prácticas durante el curso. Beatriz Lacabe, secretaria técnica de la asociación, considera “muy positiva” esta experiencia, “que ha permitido acercar el entorno laboral al instituto, tanto a los profesores como a los futuros profesionales”.

La puesta de largo de todo este trabajo tuvo lugar el pasado miércoles, 15 de junio, cuando las alumnas y los alumnos participantes, realizaron una presentación telemática de alguno de sus proyectos. En esta presentación participaron quienes han sido sus mentores y enseñantes en los centros Lares, y algunas de las personas residentes de los mismos. Todos ellos felicitaron al alumnado por el trabajo realizado y por la plasmación práctica de lo aprendido.
Para Lares Navarra, la adaptación del currículo de la Escuela de Educadoreas-es al modelo ACP supone “el cambio cultural que requiere la implantación de este nuevo modelo”. Así lo señala Beatriz Lacabe, que destaca “la gran importancia de que quienes se forman ahora en la atención a la dependencia lo hagan con las herramientas terapéuticas y la visión humanística que requiere la ACP”. “La adaptación plena del currículo a este modelo garantizará su pervivencia y éxito, y con ello la mejor calidad en la atención a las personas mayores”, ha subrayado Lacabe.
Formación, proyectos y prácticas
La colaboración durante este curso de la Escuela de Educadores y Lares, primer paso para esa adaptación total a la ACP del currículo del centro, comenzó mediante la formación al profesorado. Posteriormente, el alumnado realizó diversos proyectos centrados en aspectos de la ACP, como el concepto de “Historia de vida” que permite un mayor y más profundo conocimiento de las personas usuarias.
Koldo Valencia, tutor e impulsor de este proyecto en la Escuela de Educadores, considera que estos proyectos “son el acercamiento más pleno a los intereses, gustos y trayectoria vital de las personas usuarias, por lo que suponen una de las claves de la ACP”. “El hecho de trabajar directamente con las personas usuarias ha permitido al alumnado poner el foco en el mismo lugar en el que lo coloca la ACP: las personas, el ser humano de manera individual y personalizada”, ha explicado.
El siguiente paso consistió en la formación práctica de este alumnado en centros Lares con los que ya habían colaborado en los proyectos. Finalmente, llegó el turno de presentar públicamente lo aprendido, en esa exposición telemática que conectó la escuela con los centros, permitiendo un bonito reencuentro entre todas las partes implicadas en este trabajo.
Durante esta presentación, Miguel García, residente del centro San Isidro de Lumbier, y tras felicitar a los diferentes equipos del alumnado, celebró los avances señalando con humor que “se pasaba de la PCA - personas centradas en los auxiliares - a la ACP”. Por su parte, el presidente de Lares Navarra, Eduardo Mateo, agradeció al alumnado su implicación y puso a su disposición todo el saber de la asociación para que siga profundizando en sus conocimientos. “Pronto nos veremos, ya trabajando como profesionales formados en ACP desde el principio; os estamos esperando”, les dijo.
Estrechas relaciones personales
El epílogo (por el momento) de esta historia se vivía esta misma semana en Lesaca. Dos alumnas del CI Escuela de Educadores, Ainhoa Gascue y Valeria Aldaz, visitaban la residencia de la localidad para encontrarse con Pepita Celayeta y Julián Capdequi. Ellos fueron los protagonistas de sus proyectos de Historias de Vida; y la visita les servía para entregar a ambos un recuerdo de esa experiencia.
Julián quiso agradecer el reencuentro mostrando a Ainhoa y Valeria las calles de Lesaca, en un paseo que ya es un bonito recuerdo para todos ellos.
Tanto la Escuela de Educadoras-es como Lares Navarra seguirán colaborando en los siguientes cursos en esa adaptación total del currículo, convirtiendo esta experiencia inicial en “solo un comienzo, muy valioso, pero un comienzo en el que profundizar”, según resume Beatriz Lacabe.








