Este lunes, a mediodía, un hombre de 33 años, ha sido interceptado cuando bajaba del tren procedente de Barcelona con 300 gramos de cocaína encima.
Ha sido el agente canino K9 quien ha detectado la sustancia en la estación de trenes de Pamplona.
Ahora el hombre deberá dar explicaciones ante el juzgado y ha agradecido el "buen trabajo" del equipo canino.