Este miércoles se ha celebrado la inauguración oficial de la nueva planta de producción de Rose Holm, una empresa danesa especializada en la fabricación de componentes críticos para la industria eólica. Ubicada en el Polígono Industrial de Noain-Esquíroz, la nueva fábrica tiene como objetivo reforzar la presencia de la compañía en el mercado de la energía eólica terrestre en el sur de Europa. El evento contó con la participación del Consejero de Industria del Gobierno de Navarra, Mikel Irujo, quien destacó la importancia de la instalación para la región.
Un nuevo capítulo en la expansión de Rose Holm
Desde su fundación en 1963, Rose Holm A/S ha evolucionado de una pequeña empresa familiar danesa a un actor reconocido a nivel mundial en la producción automatizada de pernos y roscas laminadas, abasteciendo a las principales compañías del sector eólico global. Con esta nueva instalación en Navarra, la empresa consolida su estrategia de expansión internacional, que en la última década ha incluido la apertura de tres fábricas en Dinamarca y Estados Unidos.
Ann Rose Bokkenheuser, propietaria del Grupo Rose Holm, expresó su entusiasmo por la inversión de 1,2 millones de euros en la planta navarra, que generará cerca de 10 empleos locales y espera alcanzar ventas anuales de entre 3 y 6 millones de euros. “Con nuestra instalación de producción automatizada, tendremos la capacidad de fabricar pernos de cimentación para entre 600 y 800 aerogeneradores cada año, posicionándonos como un actor clave en el sector de la energía eólica y contribuyendo a la transición hacia energías renovables”, destacó Bokkenheuser.
Agilidad y proximidad para el sur de Europa
Enrique Iriarte, Director General de Rose Holm Southern Europe S.L., señaló que la instalación en Navarra responde a la creciente demanda de soluciones energéticas sostenibles en Europa. “Al establecer una fábrica competitiva de uniones atornilladas de máxima calidad cerca de nuestros clientes, ofrecemos un mayor grado de agilidad y mejoramos nuestra capacidad global, apoyando la aceleración de la instalación de aerogeneradores en la región”, explicó.
La ubicación estratégica de la fábrica en Navarra permitirá a Rose Holm optimizar la logística y reducir los plazos de entrega, clave para satisfacer la creciente demanda de componentes avanzados en un mercado marcado por la modernización de parques eólicos y el aumento de MW instalados.
Navarra, un hub estratégico para las energías renovables
La elección de Navarra como sede de la nueva planta no es casual. Según Iriarte, la región ofrece un entorno industrial robusto y un ecosistema de energías renovables consolidado. “Nuestra ambición es convertirnos en un actor clave en la fabricación de componentes para turbinas eólicas, incrementando la innovación y creando empleo local. Con el apoyo del Gobierno de Navarra, SODENA y ENERCLUSTER, estamos en una posición excelente para contribuir al crecimiento sostenible de la región”, afirmó.
Durante el evento, el Consejero de Industria, Mikel Irujo, destacó la alineación de la empresa con los objetivos de transición ecológica y digital de Navarra. “Rose Holm es un ejemplo de cómo la tecnología avanzada y las energías renovables pueden integrarse en la industria para liderar la transición energética. Navarra, con su sólido ecosistema de tecnología, universidades y proveedores, continuará siendo un referente en la energía eólica”, concluyó Irujo.
La nueva planta de Rose Holm en Navarra no solo reforzará la competitividad de la compañía, sino que también contribuirá significativamente al desarrollo económico local, consolidando la región como un hub clave en la cadena de suministro del sector eólico en Europa.