Edmundo González, opositor venezolano actualmente exiliado en España, ha revelado a través de un mensaje en redes sociales los detalles de su salida forzada de Venezuela y el contexto que rodeó la firma de un documento en el que, bajo coacción, se vio obligado a reconocer la controvertida victoria de Nicolás Maduro en las elecciones presidenciales.
"Patriotas, me dirijo a ustedes para informarles toda la verdad de lo que ocurrió con mi salida de Venezuela", expresó González al comenzar su relato. En su mensaje, el líder opositor denunció que fue víctima de presiones y amenazas por parte del régimen de Maduro, que intentó socavar su resistencia y obligarlo a aceptar públicamente una realidad que, según él, fue manipulada. "El régimen pretende que todos los venezolanos perdamos la esperanza. El mundo entero sabe que siempre recurren al juego sucio, el chantaje y la manipulación", afirmó.
González detalló cómo, mientras se encontraba refugiado en la residencia del embajador de España, fue confrontado por Jorge Rodríguez, presidente de la Asamblea Nacional de Venezuela, y Lexis Rodríguez, vicepresidenta de la república, quienes le presentaron un documento que, según le dijeron, debía firmar para poder salir del país. "En otras palabras, o firmaba o me atenía a las consecuencias", denunció.
#Comunicado a los venezolanos para informarles toda la verdad de lo que ocurrió con mi salida de Venezuela pic.twitter.com/SULvChfo9n
— Edmundo González (@EdmundoGU) September 18, 2024
En su relato, González hizo énfasis en las intensas horas de presión y chantaje que vivió en ese momento: "Hubo horas muy tensas de coacción, chantaje y presiones". Finalmente, justificó su decisión de firmar, afirmando que lo hizo para poder seguir luchando por la libertad desde el exilio: "Consideré que podía ser más útil libre que encerrado e imposibilitado de cumplir con las tareas que me encomendó el soberano", explicó.
El opositor venezolano también dejó claro que el documento que firmó carece de legitimidad, pues fue producto de la coacción. "Un documento producido bajo coacción está viciado de nulidad absoluta por un vicio grave en el consentimiento", sentenció. En su mensaje, González reafirmó su compromiso con el pueblo venezolano, asegurando que, como presidente electo por millones de venezolanos que votaron por un cambio, no se dejará intimidar ni traicionará a quienes confiaron en él: "Jamás los voy a traicionar".
González finalizó su intervención dirigiéndose a la comunidad internacional y a los ciudadanos venezolanos, recordando que la verdadera voluntad del pueblo está reflejada en las actas de escrutinio que, según él, el régimen se niega a mostrar: "La verdad es lo que es y está en las actas que ustedes pretenden ocultar". Enfatizó su promesa de cumplir con el mandato que recibió en las urnas: "No van a callar a un país que ya habló. Millones de venezolanos tienen la voluntad de cambio, y yo voy a cumplir con ese mandato".
Este mensaje ha reavivado el debate sobre la legitimidad del proceso electoral en Venezuela y el papel de la comunidad internacional en la crisis política del país.