Las instalaciones deportivo-termales del Casco Antiguo, Aquavox San Agustín, necesitan una inversión de, al menos, 4 millones de euros para corregir un total de 40 patologías detectadas. Según una auditoría encargada por el Ayuntamiento de Pamplona a una consultora externa, el edificio, construido en 2009, presenta un estado avanzado de deterioro, con signos claros de oxidación y corrosión en la mayoría de los elementos metálicos que lo conforman, incluida la estructura principal y la fachada. A la cifra adelantada en esta consultoría habría que añadir las inversiones que ya se están acometiendo en el edificio para garantizar un uso seguro a corto plazo y que sólo en este año alcanzan casi los 900.000 euros.
La citada auditoría ha detectado hasta 40 patologías en el edificio, que requieren de algún tipo de intervención. Las más urgentes son 15, y 11 de ellas afectan directamente a la actividad ordinaria del centro. En los últimos años se han realizado pequeñas actuaciones durante el cierre técnico del edificio durante 3 semanas en julio, pero según este informe, se precisan intervenciones más profundas, como las realizadas este año, para paralizar el deterioro que tiene la edificación y sus instalaciones.
863.000 euros invertidos ya este año y tres escenarios a medio plazo
El Ayuntamiento de Pamplona invertirá durante este año 863.242,81 euros para ralentizar ese deterioro y garantizar las condiciones de seguridad. Hasta el inicio de octubre había invertido 521.552 euros: 419.751 euros para la piscina de 34º, reabierta este mes; 38.459 euros en la reparación de la zona de cubierta de ese vaso y 63.342 euros en otras intervenciones. Y están pendientes 341.687,68 euros, para la instalación de un campo solar de autoconsumo (44.467,29 euros), de un sistema anticaídas en las cubiertas (25.797,20 euros) y la sustitución de calderas (271.423,19 euros). A final de año, la inversión habrá sido de 863.242,81 euros.
Ante la situación de las instalaciones, para recuperar por completo el inmueble, el informe plantea tres posibles escenarios, si se contara con el presupuesto necesario: el cierre total del centro, indefinido, hasta subsanar todas las patologías identificadas; un cierre parcial de unos cinco meses, para abordar la intervención más urgente, que afecta a la zona de vestuarios; o acometer las obras sin parar la actividad ordinaria del centro.
Si hubiera disponibilidad presupuestaria, el informe recomienda el cierre total durante cinco meses, a partir de julio de 2025, coincidiendo con el periodo de menor actividad en el edificio, pero, eso sí, cambiando el enfoque de su programación a partir de enero de 2026. El texto del informe recoge la posibilidad de acometer estas obras por fases, con un cierreparcial, de forma que siempre haya un vestuario disponible para los usuarios, mientras se actúa en los restantes.
Un déficit estructural que no remonta con la gestión actual de abonos y actividades
El Aquavox San Agustín se ha gestionado mediante un contrato de concesión de servicios de 10 años de duración, más 5 años de prórroga, que se encuentra extinguido, si bien el servicio público está cubierto hasta el 30 de septiembre de 2025. Según el informe, factores como la pandemia y la crisis energética han provocado un aumento insostenible del déficit de explotación de la instalación, concluyendo que los ingresos recurrentes no permiten cubrir los costes.
Ante la necesidad de revisar los parámetros económicos del contrato y analizar el impacto de las intervenciones previstas, se ha realizado un diagnóstico de situación con el objetivo de diseñar la licitación siguiendo una estrategia meditada para ajustar los parámetros del futuro contrato a las expectativas de retorno social y económico exigibles para una instalación como esta.
Ese diagnóstico ha analizado en primer lugar los datos de actividad de Aquavox a lo largo de sus 15 años de historia, contrastando la oferta de actividades con la demanda registrada. El número de abonados ha tenido una evolución cíclica, con fases ascendentes y descendentes. La cifra histórica máxima de abonos se alcanzó en abril de 2019 con 2.721 abonos; en el mes de abril de 2024, esta cifra era de 1.969 abonos.
En cuanto a la demanda de actividades, ha contado con una evolución algo más estable: unas 900 personas al mes realizan alguna de las actividades ofertadas en Aquavox, con excepción de la pandemia. El 46% de la demanda corresponde a actividades organizadas en piscina y el 54, a actividades organizadas en seco. Las inscripciones en actividades de agua muestran una evolución más estable.
Respecto al perfil de usuarios y usuarias, el 64% de las personas inscritas a actividades no son abonadas a Aquavox, y el 43% son mujeres, con una edad media de 51 años, y el 57% hombres, con una edad media de 46 años. El 58% de las personas abonadas se sitúan en la franja de edad 24-65 años; el 23% son mayores de 65 años; el 16% se ubica entre los 14-24 años; y solo el 3% son menores de 14 años. Además, el 45% de los abonos están sujetos a algún tipo de descuento. El 90% de las personas abonadas están domiciliadas en Pamplona -el 38% en el casco antiguo-. Y el 10% restante procede de 75 localidades diferentes.
La recomendación: un centro de salud y bienestar físico referencial en Navarra
Con base en estos datos y en la actual estrategia de mercado del Aquavox, el informe sugiere una especialización de la oferta, buscando un nicho de mercado específico o una oferta que complemente las que existen. Así, una posible especialización sería ofrecer servicios de actividad física con fines terapéuticos dirigidos a la población con diversidad funcional. Las instalaciones de Aquavox son propicias para ofrecer este tipo de servicios, aunque se precisarían algunas adaptaciones para favorecer la accesibilidad. Esta oferta ampliaría el ámbito de influencia geográfico de la instalación.
Como oferta complementaria, el informe plantea convertir Aquavox en un centro de salud y bienestar a través de la actividad física, incluyendo servicios de medicina aplicada al deporte, traumatología, rehabilitación, etc. De esta forma, todas las personas usuarias de otras instalaciones podrían ser potenciales clientes de Aquavox, bien por lesiones puntuales, o bien por la contratación de un servicio especializado determinado. Un centro de estas características ampliaría el público potencial más allá del deporte y de la actividad física, convirtiendo en potenciales clientes a prácticamente toda la población: personas que necesitan rehabilitación tras una intervención quirúrgica, personas con problemas de movilidad, etc.
Según el diagnóstico, las estrategias de especialización y complementariedad no son excluyentes. En este caso, un centro de bienestar y salud con los citados servicios de medicina aplicada al deporte podría acoger una oferta especializada dirigida a la población con diversidad funcional, lo que permitiría conciliar ambas estrategias para incrementar el alcance potencial de la oferta.
Desde una perspectiva del servicio público, este nuevo enfoque para Aquavox podría tener un mejor encaje que prorrogar la oferta deportiva realizada hasta la fecha. Un centro de salud y bienestar podría alcanzar a un volumen de población mayor que un equipamiento deportivo al uso, y ofrecería a la ciudadanía un servicio inexistente que se ajusta a la naturaleza del edificio. El informe llega a hablar de un centro referencial para toda Navarra.
Este replanteamiento de la oferta de servicios y actividades de Aquavox deberá sustentarse en un estudio de viabilidad específico que analice en profundidad las opciones que ofrece el mercado, los escenarios económicos previsibles a corto y medio plazo, y las alternativas de gestión más propicias para poder llevar a cabo este cambio de enfoque en la oferta.
