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El Parlamento de Navarra acoge un acto conmemorativo del 40 aniversario de la aprobación de la Ley Foral de la Cámara de Comptos

Se trata de un modelo copiado de los países europeos de más tradición democrática, en una época en la que en nuestro entorno no había referentes válidos

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  • 40 Aniversario de la Cámara de Comptos

El presidente del Parlamento, Unai Hualde, ha señalado que “Comptos es hoy en día, en la Navarra del siglo XXI, un órgano técnico del Parlamento de Navarra pero que tiene reconocida una total independencia funcional” y ha recordado que “Navarra fue la primera comunidad del Estado que, tras la llegada de la democracia, se dotó de un órgano de fiscalización externo. Recuperó una institución histórica con el objetivo claro de fiscalizar las cuentas y la gestión económica del sector público de Navarra y asesorar al Parlamento en materias económico-financieras”.

Hualde ha indicado que “hace cuatro años conmemorábamos el restablecimiento de la Cámara de Comptos el 28 de enero de 1980 y entonces señalé que fue una decisión audaz y pionera en el nuevo entramado institucional del Estado democrático. Y a su vez, una decisión profundamente incardinada en la protección de nuestro autogobierno en la que, a través de esta institución de raigambre histórica, se garantizaba el control de los fondos públicos por parte de las nuevas instituciones forales y locales en una situación política inestable tras la dictadura”.

En este sentido, para el presidente del Parlamento, “en estos 40 años la política, la gestión pública han cambiado mucho desde entonces. La sociedad navarra, también. Y en un momento en el que prima la inmediatez, el hoy, el individualismo, el imperio de las redes sociales, la sobreinformación, la teatralización de la política, los fake news… hoy quiero aprovechar este acto para hablar de la buena política y la buena administración de lo público”.

Unai Hualde ha señalado que “en estos 40 años hemos tenido gobiernos y mayorías de diferentes colores políticos, presidentes de la Cámara de Comptos, elegidos y propuestos por diferentes mayorías, pero todos han contribuido al prestigio y a la independencia que hoy tiene este órgano fiscalizador. Los y las personas que habéis formado, que hoy formáis parte de la Cámara de Comptos sois un elemento importante que ha contribuido a garantizar y dar seguridad al buen funcionamiento de las instituciones democráticas de Navarra”.

El presidente de la Cámara de Comptos, Ignacio Cabezas, ha advertido que la Ley “es un texto legal que define una institución unipersonal, de estructura ágil y que remarca su carácter técnico, otorgando un importante peso a auditores y letrados. Se trata de un modelo copiado de los países europeos de más tradición democrática, en una época en la que en nuestro entorno no había referentes válidos, ya que no había ningún tribunal de cuentas autonómico y el del Estado funcionaba todavía con una ley no adaptada al régimen democrático”.

Cabezas ha destacado que “la Cámara de Comptos fue pionera en la fiscalización de obras públicas, urbanismo, sanidad y prestaciones sociales. También fue precursora en la búsqueda de colaboración con las firmas privadas de auditoría, adjudicándoles el trabajo de campo en fiscalizaciones de ayuntamientos; de ese modo, podemos abarcar más en el control del amplio y heterogéneo sector local navarro”.

Asimismo, el presidente de Comptos ha señalado como clave “la apertura de Comptos a la sociedad: “es importante tener la puerta de nuestra casa abierta, literal y metafóricamente. Esa actitud supone trasladar a la ciudadanía el resultado de nuestro trabajo y estar atentos a las inquietudes y preocupaciones sociales, que deben reflejarse en nuestros programas de fiscalización”.

Sobre el trabajo de la Cámara, Ignacio Cabezas ha advertido que “los fondos Next Generation también están suponiendo un gran reto para la gestión y el control, pues implican un cambio de paradigma que se va a extender a todos los ámbitos de la gestión pública. El control está llamado a superar el mero análisis de legalidad, siempre exigible en la gestión pública, para verificar el logro de objetivos e hitos. En definitiva, hablamos de un control con la vista puesta en la eficacia y eficiencia, dos claves que la ciudadanía exige con razón a los gestores de los fondos públicos”.

Por último, el presidente de Comptos ha enumerado los siete valores y principios éticos que contiene el Plan Estratégico y que constituyen la referencia o guía de todo su personal en el desarrollo de sus funciones:  Independencia, Integridad, Objetividad, Transparencia, Profesionalidad, Servicio Público y Trabajo en equipo.

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