Los fumadores duales, es decir, aquellas personas que combinan el consumo de cigarrillos con el de vapers, tienen hasta 40 veces más probabilidades de desarrollar cáncer de pulmón respecto de una persona que no fuma. Así se desprende de un estudio reciente realizado por Marissa Bittoni para la Universidad de Ohio State. El estudio, llamado “Vapeo, tabaco y riesgo de cáncer de pulmón”, encontró que, tal y cómo se esperaba, los fumadores tienen 10 veces más probabilidades de desarrollar este tumor que quienes no fuman. La sorpresa, sin embargo, vino con el hallazgo de que, entre quienes fuman y vapean a diario, este riesgo se multiplicaba por cuatro.
En España, 7 de cada 10 jóvenes entre 18 y 25 años y 8 de cada 10 personas de 26 años o más que consumen cigarrillos electrónicos son fumadores duales. Según un estudio liderado por la Spin Off Open Evidence, de la Universitat Oberta de Catalunya, el 90 por ciento de quienes consumen cigarrillos electrónicos también fuma el de combustión y, por tanto, son fumadores duales. Estos podrían estar en peligro si, como apunta el estudio de Bittoni, las sustancias contenidas en estos dispositivos actúan como acelerantes del cáncer de pulmón.
La presidenta de Nofumadores.org, Raquel Fernández Megina, declaró que “Combinar cigarrillos electrónicos con los convencionales podría multiplicar el riesgo de sufrir uno de los tumores más letales. Esto desenmascara a una industria que afirma que son un 95% menos dañinos que el tabaco de siempre y que ayudan a dejar de fumar. Al final, ni lo uno ni lo otro”.
La autora principal del estudio, Bittoni, apunta que los líquidos convertidos en aerosol podrían estar actuando como acelerante del cáncer ya que, “al ser calentados por la batería del cigarrillo electrónico vuelcan en el pulmón una mezcla de agua, saborizantes, nicotina y otros químicos. Además, se encuentran otros ingredientes dañinos como el diacetilo, el dietilenglicol, cadmio, benceno y metales pesados como níquel, estaño y plomo. Hay un gran número de sustancias peligrosas de las que no son conscientes quienes usan estos dispositivos”.
Los vapers podrían recibir un fuerte varapalo
En España, los cigarrillos electrónicos se encuentran ante la expectativa de recibir un duro golpe legislativo, ya que el nuevo Real Decreto por el cual se modifica el RD 579/2017 de 9 de junio, por el que se regulan determinados aspectos relativos a la fabricación, presentación y comercialización de productos de tabaco y relacionados planea fuertes restricciones para los saborizantes. El Ministerio de Sanidad apuesta por eliminar los sabores que hacen que este producto, tan adictivo, sea atractivo para niños y adolescentes, funcionando en ocasiones como puerta de entrada al cigarrillo, ya que los estudios apuntan que quienes vapean tienen tres veces más posibilidades de empezar a fumar.
Desde Nofumadores.org, y ante la acumulación de estudios que van en este sentido, se realiza un llamamiento a aquellos fumadores que, engañados por la industria y ante la falta de un acceso universal a los tratamientos farmacológicos y conductuales para dejar de fumar, tratan de abandonar la adicción por su cuenta, y acaban combinando dos productos cuya interacción puede causar cáncer de pulmón y, probablemente, otras muchas patologías aún por descubrir.
El estudio desmonta la teoría de la reducción de daños de las tabaqueras
Las conclusiones de este estudio suponen una refutación a la publicidad de la industria que habla de “reducción de daños” del vapeo cuando se compara con los cigarrillos convencionales. Para Bittoni, los resultados sugieren que “en vez de crear un microambiente menos favorable para el crecimiento y desarrollo de tumores en el pulmón, la exposición a los líquidos en forma de aerosol podría, de hecho, promover la carcinogénesis”.
Para la presidenta de Nofumadores.org, los consumidores de estos productos adictivos, especialmente los jóvenes, “han caído en la trampa de este eslogan de la reducción de daño fomentada por la industria que les hace pensar que vapear es más seguro, pero no existe ninguna evidencia científica de estudios independientes. Con el cigarrillo electrónico el líquido entra en los pulmones en forma de aerosol. A la larga, no sabemos siquiera si eso es mejor que quemar tabaco y, desde luego, combinarlo es una bomba”.
El estudio reflejaba que, en la práctica, todos los consumidores de vapers eran también fumadores, por lo cual no pudieron estimar por separado el riesgo de cáncer de pulmón de quienes vapean exclusivamente. Sin embargo, según las conclusiones del estudio, esto no resulta un problema para poder afirmar que los componentes del vaper aceleran drásticamente el cáncer de pulmón causado por el cigarrillo.
Además, el hecho de que estas personas a las que se les ha realizado el estudio hayan fumado por un período de tiempo sustancialmente mayor al tiempo que llevan usando cigarrillos electrónicos podría no ser un factor central, ya que, afirma el estudio, los vapeadores podrían estar acelerando un cáncer ya presente antes de que la persona comenzara a usar estos dispositivos de liberación de nicotina.
El estudio de Bittoni se realizó comparando un grupo de 4.975 personas a las cuales habían diagnosticado recientemente cáncer de pulmón con otro grupo de control formado por 27.294 personas sin cáncer en el que se replicaron las características del primero en cuanto a edad, sexo, raza y lugar de residencia.