El proyecto para levantar un nuevo ámbito residencial en Lezkairu da un paso decisivo. La Gerencia de Urbanismo ha aprobado inicialmente este miércoles el Plan Especial de Actuación Urbana (PEAU) de la parcela L23, situada junto a la plaza Maravillas Lamberto, lo que permite avanzar en la construcción de más de 250 viviendas libres y hasta 50 viviendas protegidas en uno de los espacios estratégicos del barrio.
La parcela L23, dividida en tres áreas —L23-1, L23-2 y L23-3—, fue adjudicada el pasado mes de mayo mediante subasta pública, de la que el Ayuntamiento obtuvo 39 millones de euros. La aprobación del PEAU era un requisito previo a esta operación y tiene como objetivo principal regular una imagen unitaria del conjunto, además de introducir ajustes en los usos previstos por el planeamiento vigente. Entre ellos, destaca la posibilidad de transformar el uso de oficinas de la primera planta en vivienda protegida, así como la consolidación del uso terciario en planta baja —comercio, restauración y oficinas— para impedir su conversión en viviendas.
El plan mantiene la ordenación definida en el Plan Parcial, tras un proceso previo de participación ciudadana en el que se estudiaron distintas alternativas. Finalmente, se optó por no modificar la estructura urbanística y centrar los cambios en los aspectos funcionales y formales que ahora recoge el PEAU.
Uno de los ejes del proyecto es la nueva imagen de la plaza Maravillas Lamberto, concebida como un espacio abierto, moderno y atractivo, con un marcado protagonismo del espacio público. Aunque no forma parte directa del PEAU, el Ayuntamiento prevé la peatonalización de la calle Isabel Garbayo Ayala, que conectará la plaza con el parque Alfredo Landa, generando un recorrido continuo y amable, tal y como se acordó en el proceso participativo. Los edificios actuarán como telón de fondo de la plaza, reforzando su carácter urbano.
La fachada principal, orientada hacia la plaza, se plantea con un diseño abierto y contemporáneo, con terrazas continuas que aportan luminosidad, vistas y una mayor relación entre las viviendas y el entorno. Estas terrazas incorporan barandillas de vidrio y elementos ligeros, junto con piezas verticales que garantizan la privacidad en las zonas más expuestas. En contraste, las fachadas interiores presentan un tratamiento más sobrio y funcional, orientado al confort y la intimidad, con materiales duraderos como el hormigón prefabricado en tonos claros y, de forma puntual, fachadas ventiladas de chapa perfilada.
En cuanto a la vivienda protegida, el número definitivo dependerá de los proyectos que se desarrollen en cada parcela. No obstante, el planeamiento fija superficies concretas: 1.724 metros cuadrados en la L23-1, que podrían albergar en torno a 16 viviendas; 1.998,8 metros cuadrados en la L23-2, con unas 18 viviendas; y 900 metros cuadrados en la L23-3, con capacidad para unas 8 viviendas protegidas.
Con la aprobación inicial del PEAU, el desarrollo de la parcela L23 avanza hacia su materialización, combinando vivienda libre y protegida, actividad económica en planta baja y un diseño urbano pensado para reforzar la centralidad y la calidad del espacio público en Lezkairu.
