La Universidad de Navarra justifica el Plan Donapea por la saturación del campus

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En un informe que ha incorporado el Gobierno al PSIS, el centro universitario argumenta que se ha aumentado mucho la densidad de edificios en el campus, y que Donapea permite ampliar los futuros centros tecnológicos

Pamplona, 7 de octubre

Ya conocemos el informe que el Gobierno de Navarra ha incorporado al PSIS, y que actualmente está en exposición pública tras la publicación de todo el expediente en el Boletín Oficial de Navarra. El documento, fue elaborado en marzo por la Universidad de Navarra y justifica en cinco motivos las razones por las que este centro universitario prefiere los actuales terrenos de Donapea sobre cualquier otra localización para instalar los nuevos centros de investigación.

Entre estos argumentos llama la atención la explicación de la Universidad de Navarra bajo el razonamiento de que “ la oportunidad de instalarse en los terrenos actuales del CIPP Donapea permite no aumentar el impacto medioambiental de las construcciones, que ha sido importante en los últimos años”.  La Universidad de Navarra asegura que “la zona de Ciencias está saturada y en la orilla norte del río Sadar se ha aumentado mucho la densidad de edificios (en los últimos años se han hecho el CM Olabidea, la Biblioteca, y los edificios de Comunicación y Amigos, además de la obra actual del Museo)”.

La Universidad de Navarra prosigue afirmando en su informe que “ la estrategia urbanística del campus  dela Universidad de Navarra  es la de mantener el concepto de parque urbano, con amplios espacios verdes”. Y concluye recordando que,  por motivos de seguridad, ha sido necesario asfaltar grandes superficies, destinadas a aparcamientos de vehículos en el Polideportivo y frente al edificio de Comedores.

La futura ampliabilidad de los terrenos que actualmente ocupa el Centro Donapea es otro de los argumentos que incluye el informe que asegura que en dicho lugar “hay espacio disponible para los nuevos centros de investigación y también para plantear las ampliaciones futuras que se consideren necesarias, relacionadas con los propios centros e incluso con otros proyectos con impacto en el empleo, como la incubadora de empresas mencionada en el Proyecto Horizonte 2015”.

La Universidad de Navarra argumenta en otra parte del informe que “los terrenos de Donapea se encuentran en una ubicación adecuada desde el punto de vista de la funcionalidad de la actividad universitaria”. Para este centro universitario, estas instalaciones “se encuentran a una distancia razonable de otros edificios con los que los investigadores de los centros mantendrán una relación profesional continua: CIMA, las Facultades del área biosanitaria (Ciencias, Farmacia, Medicina y Enfermería) y de la Clínica Universidad de Navarra” .

Por otro lado,  en el informe se justifica que “al ser una zona ya urbanizada, con edificios construidos y accesos consolidados, es obvio que los costes de oportunidad de esta fórmula son ventajosos, al no tener que acometer la construcción completa de nuevas infraestructuras ni de edificios”.

Para la Universidad de Navarra contar rápidamente con estos edificios de Donapea “facilitará la instalación inmediata, una vez realizadas las oportunas reformas. Esto supone claras ventajas de ahorro económico y de tiempo para poner en marcha el proyecto”.

El informe recuerda su impresión de que se trata de una “oportunidad” que resulta beneficiosa para todas las partes y que “no tiene sentido, por tanto, ver esta cuestión en términos de necesidad forzosa, sino de aprovechamiento de una oportunidad” .

El documento concluye afirmando que en el Plan Donapea no existen, en su opinión, “efectos negativos colaterales”, ya que si se lleva a cabo “el traslado del CIP Donapea a un nuevo campus público de formación profesional, con todas las mejoras que unas instalaciones adaptadas a los nuevos tiempos suponen, hace que en esta operación todos los agentes implicados salgan ganando”. “No hay razón para pensar que alguien pierde o que haya efectos negativos colaterales: los estudiantes y profesionales del CIP Donapea disfrutarían de unas mejores instalaciones y la Universidad de Navarra podría contar con el espacio adecuado para los centros de investigación”, finaliza.

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