Los servicios medioambientales emiten una declaración ambiental desfavorable sobre la modificación del Plan Urbanístico de Ezcabarte para construir 12 viviendas
Pamplona, 23 de octubre
La Dirección General de Medio Ambiente del Gobierno de Navarra ha emitido una declaración ambiental desfavorable sobre la modificación del Plan Urbanístico de Ezcabarte, en Sorauren, para la construcción de 12 viviendas que iba a ejecutar la promotora navarra Construcciones San Martín.
La opinión desfavorable se basa en el análisis del impacto acústico de la urbanización, donde el Ejecutivo considera que se incumplen los objetivos de calidad acústica, siendo la principal afección sonora el tráfico de la N-121A y se proponían inicialmente como medidas correctoras, dos barreras acústicas (una colindante al río Ultzama y otra paralela a la infraestructura viaria) y una pantalla acústica, en el puente que salva el río.
Sin embargo, Medio Ambiente señala posteriormente que a pesar de la aplicación de dichas medidas correctoras propuestas, “los objetivos de calidad acústica no se cumplen en todo el sector residencial, superándose en los espacios destinados a zonas verdes y de uso público”, por lo que emite ese informe desfavorable “puesto que la aplicación de las medidas correctoras propuestas resulta insuficiente para garantizar el cumplimiento de los objetivos de calidad acústica en el sector residencial SOR-21”.
Las 12 viviendas de Sorauren
Según especifica la resolución del Ejecutivo, se trataba del desarrollo de un área residencial de 12 viviendas en la parcela 341, promovido por Construcciones San Martín SA, ubicada a la entrada de la localidad de Sorauren, entre el río Ultzama al norte y la carretera NA-8101 y N-121A, al este y al sur. El Ayuntamiento de Ezcabarte había propuesto modificar la clasificación del ámbito, pasando de “suelo no urbanizable de media productividad agrícola y ganadera” y “suelo destinado a infraestructuras” a “suelo urbano no consolidado” quedando delimitado como la Unidad SOR-21.
La propuesta de ordenación se organiza en torno a un nuevo vial, al que se accede desde la calle San Andrés, quedando las zonas verdes ubicadas perimetralmente, en los límites con la N-121A y con el río Ultzama.







