Ignacio Ugalde, presidente de ANEL, inauguró el acto dando la bienvenida a las más de 150 representantes de empresas que acudieron a la cita. Ugalde definió el Programa de Liderazgo Participativo como un “foro en el que buscamos intercambiar ideas que contribuyan a convertirnos en mejores líderes, un espacio de encuentros para generar conocimientos compartidos que nos ayuden a transformarnos a nosotros y a nuestro entorno”
Pamplona/Iruña, 7 de abril de 2017
Hay una tendencia a considerar que un líder no tiene que mostrar emociones y que las relaciones poderosas, en la empresa o en lo personal, se basan en la dureza, el golpe en la mesa (o de tuit) y el control. Marian Frías, terapeuta creativa y psicóloga, además de habitual colaboradora en medios de comunicación y en programas televisivos, lo ha desmentido en Pamplona en la conferencia del programa de Liderazgo Participativo organizado por ANEL. “Muchas veces”, agregó Frías, “se ha pensado que el liderazgo era dejar los sentimientos fuera y no es así, necesitamos a nuestras emociones para decidir, ser buenos líderes y tener buenas relaciones con los demás”.
“La relación más importante que tenemos es con nosotros mismos”, añadió en otro momento de su intervención que reunió a más de 150 personas que participaron activamente en sus propuestas. “Siempre pensamos en mejorar las relaciones hacia fuera, pero no con nosotros mismos”, apuntó. “Nosotros somos lo que todas las relaciones de nuestras vidas tienen en común. Lo mejor que podemos hacer es cuidar de nosotros mismos para después con los demás”, añadió Marian Frías.
El presidente de ANEL, Ignacio Ugalde, y trabajadores de la Asociación, presentes en la conferencia
Por su parte, Ignacio Ugalde, presidente de ANEL, inauguró el acto dando la bienvenida a las más de 150 representantes de empresas que acudieron a la cita. Ugalde definió el Programa de Liderazgo Participativo como un “foro en el que buscamos intercambiar ideas que contribuyan a convertirnos en mejores líderes, un espacio de encuentros para generar conocimientos compartidos que nos ayuden a transformarnos a nosotros y a nuestro entorno”.
Esta conferencia ha sido la primera de las que se realizarán a lo largo del 2017 y su objetivo es “dar a conocer, sensibilizar y sentar las bases para la evolución en el estilo de liderazgo hacia un liderazgo participativo”. Por último, el presidente de ANEL trasladó al público algunas de las habilidades clave del liderazgo participativo: la influencia, la dirección, la motivación, el compromiso, el equipo y la innovación social”.
Conectar con nuestras capacidades naturales
Marian Frías, terapeuta creativa y escritora -además de psicóloga, sexóloga, coach experta en relaciones e inteligencia emocional y máster en programación neurolingüística- hizo de la conferencia un encuentro muy práctico y enriquecedor a través de explicaciones, dos dinámicas (una individual y otra por parejas) y una fábula, que ayudaron a poner en práctica alguna de la claves sobre las que versó su intervención.
La idea central sobre la que giró su conferencia es que “para aprender a relacionarnos bien, debemos generar un espacio para poder reconectar con lo que ya somos, con nuestras capacidades naturales. Debemos conectar con los recursos internos para poder relacionarnos bien. Esto es tan importante que hasta podemos enfermar si no tenemos relaciones sanas”.
La fuerza magnética de las personas y el liderazgo
Las personas estamos divididas en dos tipos de energías, la eléctrica y la magnética. “La primera tiene que ver con conseguir objetivos y metas, con el estrés, mientras que la magnética tiene mucho que ver con el liderazgo. Es una energía receptiva, de percibir, de estar a alerta”. Así, cómo si de una fórmula matemática se tratara, cuando se produce un equilibrio entre ambas, “las cosas buenas nos llegan”.
Para ilustrar este punto, la terapeuta y creativa habló y explicó en qué consiste la Técnica del STOP. “Nos viene a decir que hay que parar, si no se está bien, dar un paso hacia atrás que no significa huir”, pensar qué es lo realmente importante para mí, qué es lo que quiero conseguir, cuáles son las cosas que me mantienen contento y feliz o los motivos por los qué monté la empresa; organizarse para llevarlo a cabo, centrarse porque solo así funcionará y proceder”.
