La nueva aportación al proyecto que impulsa Duguna desde 2008 busca crear danzas que formen parte del patrimonio coreográfico de Pamplona
Pamplona/Iruña, 27 de junio de 2017
La plaza Consistorial acogerá en Sanfermines el estreno de un nuevo ciclo de danzas de troqueo de la mano de Duguna-Iruñeko dantzariak.
De esta forma, Duguna continúa con su idea de crear y presentar siempre que bailen en la plaza del Ayuntamiento y que no tengan un protocolo propio, como el 8 de septiembre y el domingo de San Fermín de Aldapa, danzas propias que terminen convirtiéndose en representativas de la ciudad. Unas danzas con las que los pamploneses puedan a llegar a identificarse con el paso del tiempo. En total, se ha creado un nuevo ciclo de 7 danzas que serán presentadas de 4 en 4, los días 7 y el 14 de julio y 29 de noviembre, festividad de San Saturnino.
En las ‘trokeo dantzak’ o danzas de troqueo bailan ocho dantzaris, organizados en dos filas que utilizan palos, espadas, arcos u otros instrumentos en las mudanzas de cada baile, y un \'Bobo\', personaje que vigila el transcurso de cada danza y participa en alguna de ellas.
A lo largo de la actuación los dantzaris intercambian las posiciones, característica principal de este género de dantzas. Estos cambios de lugar se realizan mientras los dantzaris interpretan los pasos y hacen golpear los instrumentos de baile que llevan en las manos, tal y como han explicado en la rueda de prensa de presentación la directora del área de Cultura, Política Lingüística, Educación y Deporte, Maitena Muruzábal, y el director de Duguna-Iruñeko dantzariak, Aritz Ibáñez.
El punto inicial del proyecto en el que se incardinan estas danzas de troqueo es la reflexión realizada hace 10 años en el seno del grupo Duguna al interpretar que existía cierta crisis de identidad en los grupos de danzas urbanos. Observaron que, sin embargo, las formaciones de lugares que contaban con dantzas propias con las que se identificaban los vecinos no tenían esas disquisiciones.
Dotar a la ciudad de un patrimonio coreográfico propio
Así llegaron a la conclusión de que siendo dantzaris municipales tenían un contexto apropiado para crear bailes propios, ya que el grupo participa en las fiestas más importantes de la ciudad. Según la abundante documentación recogida en el ensayo \'La danza en las fiestas y ceremoniales de Iruña a través de la historia\' de Jesús Ramos, la presencia de danzantes o dantzaris en las fiestas de Pamplona desde el SXVI hasta la actualidad ha sido muy común. En este sentido, el autor señala a los dantzaris municipales como grupo heredero de esta tradición de siglos.
Por ello se plantearon dotar a la ciudad de un patrimonio coreográfico propio. Hasta el momento ya han presentado la ezpata-dantza de San Fermín de Aldapa, las soka-dantzas que se bailan el día de San Blas y la víspera de San Juan y también la soka-dantza del Día del Privilegio de la Unión (8 septiembre).
Siete coreografías distintas basadas en melodías de bertsos y cantos
En las crónicas de bailes de Pamplona de los siglos XVI, XVII y XVIII son habituales las danzas ofrecidas por 8 dantzaris y un personaje llamado ‘Bobo’: makil-dantzak (tanto de palos grande, como pequeños), brokel dantzak, arku-dantzak, zinta-dantzak... Las ‘trokeo dantzak’ que se presentarán y que están basadas en diferentes melodías de bertsos y cantos son:
Kantatzen behar det hasi (entrada)
Betroiarena (danza del palos pequeños)
Iruñeko ferietan (danza del palos grandes)
Ama begira zazu (danza de espadas y broqueles)
Arri, arri, mandoko (danza de cintas)
Proportzio bat (danza de arcos)
Muga gainetik (torre humana)
Muchas de las melodías en las que basan las danzas proceden del norte de Navarra y de la zona de Baja Navarra, Lapurdi y Zuberoa y pertenecen a los siglos XVIII, XIX y XX. Durante estos siglos ha sido común la presencia en Pamplona de músicos y dantzaris provenientes de Baigorri, Osés, San Juan de Pie de Puerto o de San Juan de Luz.
En la actualidad, por ejemplo, los gaiteros de Baigorri acompañan a la Reina asiática de la Comparsa de Gigantes y Cabezudos.
Según sus impulsores, el ciclo de las ‘trokeo-dantzas’ no esta cerrado y el número puede ampliarse. Al bailarse cada día parte de ellas, las actuaciones no serán siempre iguales. La formación orquestal básica para estas dantzas son dos gaitas y un tambor.
