Atacaba a las gallinas. El ejemplar de esta especie, en riesgo de extinción, ha sido devuelto al río Arga, su hábitat natural
Pamplona/Iruña, 16 de noviembre de 2017
Ocurrió el sábado. En uno de los estanques de La Taconera, los técnicos municipales habían colocado una trampa camuflada entre la vegetación para tratar de conocer qué estaba pasando últimamente en la zona, donde en los últimas semanas iban apareciendo ejemplares de gallinas de diferentes razas muertas.
Sospechaban que se trataba de una acción de predación ‘natural’ y no de un acto de vandalismo como los acaecidos en otros momentos en esta zona, así que el personal del Área de Ecología Urbana y Movilidad pidió la colaboración del Guarderío Forestal del Gobierno de Navarra para resolver este misterio.
Cuando colocaron la trampa por si se trataba de un predador terrestre lo que no pensaban encontrar el sábado al escuchar los ruidos en su interior fue que el intruso era un visón europeo, especie autóctona catalogada en peligro de extinción. Siguiendo un protocolo establecido para esta especie protegida, lo recogieron y le dieron suelta inmediatamente en una zona del río Arga, que es su hábitat natural y en el que puede cumplir todas sus necesidades vitales.
Según explican los técnicos municipales, el hecho de que haya sido encontrado en estas fechas sugiere que puede tratarse de un ejemplar joven, dado que en otoño, los juveniles de esta especie se dispersan buscando nuevos territorios. En esta dispersión puede suceder que se asienten temporalmente en hábitats menos apropiados, como el caso de los estanques de la Taconera.
Los últimos ejemplares de Europa
El visón europeo es, junto con el lince ibérico los mamíferos carnívoros más amenazados de la Península Ibérica y una de las especies animales en mayor riesgo de desaparición del planeta. Ha desaparecido de la mayor parte de Europa y en el territorio nacional está presente en Navarra, La Rioja, País Vasco, Burgos, Soria y Aragón. En total, se estima una población de 500 individuos, de los cuales algo más de la mitad se encuentran en Navarra.
El visón europeo (Mustela lutreola) es un mustélido semiacuático de pequeño tamaño. El mejor criterio para identificar al visón europeo es su color marrón chocolate uniforme en todo el cuerpo excepto dos pequeñas manchas blancas, una en el labio superior y otra en el inferior. El visón americano se diferencia del europeo porque solo tiene la mancha en el labio inferior. Ocupa ambientes acuáticos como ríos, cauces secundarios, arroyos, acequias, barrancos, lagunas, etc., y es por ello que de manera circunstancial ha podido desplazarse desde el río hasta los estanques de La Taconera.
Su alimentación se basa en ratas de agua, ratones, topillos, anfibios, peces y cangrejos. Caza durante la noche y el crepúsculo, mientras que es de escasa actividad diurna. Se tiene constancia de que puede atacar a gallineros aunque estas aves no formen parte de su ingesta habitual.
Una de las principales amenazas para su conservación es la presencia del visón americano, especie exótica invasora y claro competidor en cuanto a recursos alimenticios y hábitats. Esta especie exótica está presente en nuestro medio natural como consecuencia de su huida accidental o provocada desde granjas donde se cría para obtener su piel.
La otra gran amenaza para el visón europeo es la destrucción y degradación de los hábitats en donde vive. En general, el visón europeo es un magnífico indicador de la integridad ecológica de arroyos, sotos y riberas. Aunque la Taconera está cerca de algunos tramos del río Arga, este hecho no deja de ser un hecho aislado y anecdótico. El espacio fluvial es el espacio por el que se debe apostar de cara a afianzar y mejorar su carácter como espacio refugio de fauna.
Toda actuación susceptible de afectar al visón europeo y sus hábitats debe cumplir con una serie de medidas preventivas con el fin de reducir o evitar dicha afección. En este sentido, en las zonas donde potencialmente se espera la presencia de visón, a la hora de intervenir se debe aplicar una serie de protocolos definidos en los condicionados ambientales del Departamento de Desarrollo Rural, Medio Ambiente y Administración Local del Gobierno de Navarra.
Conseguir espacios donde se aúnen urbanidad y naturalidad es una demanda creciente por parte de la sociedad. El ámbito del parque fluvial conformado por los ríos Arga, Elorz y Sadar es un claro candidato para este fin. En este sentido se trabaja desde las distintas Áreas municipales implicadas, ha señalado el consistorio en una nota.









