Artificieros de la Armada harán detonar hoy el proyectil, que se encuentra a unos 25 metros de la línea de mar. Se trata de un artefacto antiguo, probablemente una bomba sin explosionar de la Guerra Civil.
La Guardia Urbana ha procedido a desalojar, ayer a la mañana, la playa barcelonesa de Sant Sebastià después de que la Guardia Civil haya localizado, a unos 25 metros de la línea de mar, un artefacto explosivo antiguo, probablemente de la Guerra Civil. Inicialmente se ha acordonado un perímetro de unos 250 metros, un espacio que posteriormente se ha ampliado a toda la playa de Sant Sebastià. El artefacto ha sido descubierto casualmente por un miembro del GEAS de la Guardia Civil mientras se bañaba ayer en la playa.
El teniente de alcaldía de Seguridad y Prevención, Albert Batlle, explicó que serán los artificieros de la Armada, provenientes de la base de Cartagena, los encargados de hacerlo detonar en el mismo lugar donde se encuentra. Batlle explicó que serán estos mismos los encargados de determinar con más exactitud el origen y la antigüedad del artefacto.
Mientras tanto, el proyectil seguirá en el mar y se mantendrá cerrada la playa a los usuarios mientras duren las tareas de los artificieros y especialistas. El perímetro de desalojo no ha afectado a los clubes deportivos cercanos, que pueden seguir sus actividades habituales.
Batlle, que ha acudido a la playa acompañado de la teniente de alcaldía de Derechos Sociales, Laura Pérez, ha destacado la «coordinación perfecta» de los cuerpos de seguridad -Guardia Civil, Mossos, Guardia Urbana y Policía Portuaria, además los servicios de urgencias y emergencias- para proceder al desalojo de la playa que se desarrolló sin incidencias. Asimismo ha agradecido la comprensión y el civismo de los bañistas ante la medida preventiva.







