Este sábado, cincuenta hijos de trabajadores de Volkswagen Navarra participaron en la plantación de 47 árboles en el recinto de la fábrica de Landaben, en lo que se ha denominado el Bosque Cross. Este acto, enmarcado en el camino hacia la electrificación de la factoría, se enmarca en el compromiso de la planta navarra con la movilidad sostenible y el respeto al medio ambiente. En 2026, Volkswagen Navarra lanzará sus primeros vehículos eléctricos, un Škoda y un Volkswagen, lo que marcará el primer paso de su transformación.
Los árboles plantados son carrascas autóctonas, una especie resistente y sostenible, ya que no requieren riego ni cuidados especiales. Según Ana Moreno Twose, responsable de Medio Ambiente de la fábrica, las carrascas son una "opción perfecta para el entorno, porque respetan y preservan la biodiversidad local". Este tipo de árboles simboliza la armonía entre la industria y la naturaleza, elementos clave en el proceso de sostenibilidad de Volkswagen Navarra.
El nombre Bosque Cross, elegido por la empresa, hace referencia a los futuros modelos Cross que formarán parte de la oferta de vehículos de la factoría de Landaben. El presidente de Volkswagen Navarra, Michael Hobusch, destacó el carácter simbólico del evento, afirmando que no solo representa la plantación de árboles, sino también el "crecimiento de la fábrica, de nuestra responsabilidad medioambiental y de las nuevas generaciones comprometidas con la biodiversidad".
En su intervención, Hobusch también subrayó el componente familiar del evento: "No solo estamos aquí como empleados y familiares de Volkswagen Navarra, sino como una gran familia unida por un propósito común: contribuir al bienestar de nuestro planeta". Además, destacó la presencia de jóvenes y mayores, lo que subraya el compromiso intergeneracional hacia el medio ambiente.
