La Fundación Enfermeras de Navarra (FEN) apoyará en la búsqueda de financiación a las colegiadas y colegiados que quieran enviar e instalar cunas climáticas en países en vías de desarrollo. Así se recoge en el convenio de colaboración firmado recientemente entre la FEN, fundación del Colegio Oficial de Enfermeras de Navarra-Nafarroako Erizainen Elkargo Ofiziala (COENAV), y la ONG Medicina Abierta al Mundo, que desarrolla estas incubadoras de bajo coste.
El acuerdo fue rubricado por la presidenta de la FEN y del COENAV, Isabel Iturrioz Núñez, y por el fundador y director de la ONG, Pablo Sánchez Bergasa.
El proyecto “Cunas climáticas” se inició en 2020 en respuesta a la pandemia y a la alta mortalidad infantil en países en vías de desarrollo. Aunque no son incubadoras comerciales, estas cunas aumentan las probabilidades de supervivencia de recién nacidos con bajo peso. “Simulan las condiciones del vientre materno en cuanto a que controlan la temperatura y humedad. Además, incorporan fototerapia para tratar la ictericia”, explicó durante la presentación del convenio Pablo Sánchez, quien recientemente recibió el Premio Princesa Girona Social 2025 por esta iniciativa.
Ya hay instaladas más de 200 cunas climáticas en cerca de 30 países, “el 80% en África, aunque también han llegado a países de Latinoamérica, Nepal y Ucrania”, concretó Pablo Sánchez.
PRECIO DE COSTE DE CADA CUNA: 350 €
Las cunas están equipadas con tarjetas digitales que envían datos en tiempo real, lo que permite su monitorización desde España para detectar fallos y reemplazar piezas cuando sea necesario.
Fabricadas en talleres de Formación Profesional de Salesianos Navarra por estudiantes de mecánica de manera voluntaria, Medicina Abierta al Mundo” se encarga de ensamblar la parte electrónica, realizar las pruebas funcionales y programar los componentes. Por su parte, la ONG Ayuda contenedores colabora en su transporte.
Tal como se detalló en la firma del convenio celebrada en la sede de COENAV, cada cuna tiene un precio de 350 €, “que es el coste de los materiales, ya que todo el trabajo lo hacemos un grupo de voluntarios de manera altruista y gratuita en nuestro tiempo libre. El precio de una incubadora comercial de las que se utilizan en España ronda los 35.000 €”, explicó Pablo Sánchez.
TRANSPORTE EN MALETA EN AVIÓN
La cuna, que pesa unos 14 de kilos, puede plegarse, lo que permite su transporte en avión dentro de una maleta de dimensiones normales. Una vez en el destino, “el montaje resulta sencillo siguiendo el manual de instrucciones”, según relató en la presentación del convenio la enfermera navarra Sheila Sevillano Royo, cofundadora de la ONG Y os lo cuento, que llevó e instaló dos de estas cunas el verano pasado en El Salvador. Si hubiera dificultades para el montaje, “existe la posibilidad de hacer una videollamada para aclarar dudas”, apuntó José Antonio Landa Aznárez, vicepresidente de “Ayuda contenedores”, quien también participó en la presentación.
“Nosotros construimos esas cunas, pero necesitamos llevarlas a sitios en los que hagan falta. Necesitamos a gente que encuentre lugares donde enviarlas”, concluyó Pablo Sánchez sobre el objetivo del acuerdo firmado con la FEN.
Adjuntamos dos fotografías (pie de foto):
Presentación del convenio de las cunas climáticas. De izquierda a derecha, Sheila Sevillano (Y os los cuento), Pablo Sánchez (Medicina abierta al mundo), José Antonio Landa (Ayuda Contenedores) e Isabel Iturrioz (presidenta del COENAV y de la Fundación Enfermeras de Navarra). Sobre la mesa, una de las incubadoras de bajo coste.