Los Pirineos y toda su biodiversidad se ven amenazados por el cambio climático a un ritmo acelerado, más que otros territorios; según la comunidad científica, en los Pirineos, la temperatura ha aumentado en las últimas seis décadas un 30% más que la media global. Esta situación requiere de una acción urgente y a gran escala que no repare en fronteras. De esa necesidad surge el proyecto europeo LIFE PYRENEES4CLIMA, ‘Hacia una comunidad de montaña transfronteriza resiliente al cambio climático en los Pirineos 2024-2031', en el que participan siete regiones de España, Francia y Andorra. Entre ellas, Navarra.
Coordinado por el Observatorio Pirenaico de Cambio Climático (OPCC) de la Comunidad de Trabajo de los Pirineos (CTP), se trata de un proyecto que desplegará la primera estrategia transfronteriza de cambio climático de Europa, la EPiCC, en el entorno de local. De hecho, su apuesta por la intervención en los territorios de la biorregión pirenaica es uno de sus grandes valores. Para ello, a lo largo de los próximos siete años, se pondrán en marcha 33 casos demostrativos gracias a esa colaboración transfronteriza entre siete regiones: Andorra, Aragón, Cataluña, Navarra, País Vasco, Occitania y Nueva Aquitania. En total, 46 entidades de las siete regiones desplegarán una acción común que buscará, a través de diversos ejes, fortalecer la resiliencia en los Pirineos con la aplicación de medidas de adaptación al cambio climático. El presupuesto es de casi 20 millones de euros.
Siete casos piloto en Navarra
Las experiencias demostrativas se dividen en cinco ámbitos de actuación: comprensión de los impactos climáticos, mejora de la resiliencia de los espacios naturales, adaptación de la economía de montaña, protección de la población y del territorio frente a los riesgos naturales-climáticos y el deterioro de los recursos, y potenciación de un sistema innovador de gobernanza climática que haga partícipe a la ciudadanía, a los sectores socio-económicos, a la comunidad científica y a los responsables de la gestión política.
En concreto, en Navarra se pondrán en marcha siete casos piloto en tres ámbitos. Participan como socios del PYRENEES4CLIMA el Gobierno de Navarra, las empresas públicas Gestión Ambiental de Navarra (GAN-NIK), Nilsa, y Nasuvinsa a través de la Agencia Lursarea, la Universidad de Navarra y la Universidad Pública de Navarra. Además, para el desarrollo de las diferentes experiencias se busca la implicación de las entidades locales y agentes territoriales interesados.
En el ámbito de economía de montaña adaptada, en Navarra se pondrán en marcha dos pilotos, que se desplegarán por zonas de la comarca pirenaica. Uno de ellos se centra en las estaciones de esquí de montaña, en el desarrollo de un modelo económico de transición al cambio climático, y está liderado por Agence des Pyrénees (ADP).
El segundo piloto consiste en la mejora de los sistemas de producción ganadera, aumentando la fuente de alimento natural para los animales, mejorando el paisaje y generando más retorno económico para las explotaciones. El piloto se desarrolla en la Zona de Especial Conservación (ZEC) Roncesvalles-Selva de Irati y en los valles franceses limítrofes, y está liderado por la Universidad Pública de Navarra en la vertiente española y por la Association des Chambres d'Agriculture des Pyrénées en la vertiente francesa.
En el ámbito de población y territorio se han puesto en marcha otros tres pilotos. El primero consiste en la evaluación de los servicios ecosistémicos en más de medio centenar de municipios de las comarcas de Baztán-Bidasoa, Prepirineo y Pirineo, mediante la creación de un sistema abierto y global, accesible a las partes interesadas, gestores del territorio y personal científico. Lo lideran el Basque Centre for Climate Change (BC3), el Centro de Investigación y Tecnología Agroalimentaria de Aragón (CITA) y Nasuvinsa.
El segundo se centra en el análisis y evaluación de la calidad del aire en diferentes tipologías de emplazamiento en el territorio pirenaico, que se desarrollará en la zona de Valcarlos-Luzaide, para identificar las situaciones de extremos climáticos que influyen en dichos niveles y la estimación de la exposición de la población y los ecosistemas. Está liderado por Andorra Recerca Innovació (AR+I), la Universidad de Barcelona y la Universidad de Navarra.
El tercero, que se despliega en la zona norte de Navarra, se centra en el análisis y evaluación de la calidad y de la gestión del agua en el territorio pirenaico, mediante la elaboración de un plan de gobernanza para el abastecimiento de agua potable que evalúe los recursos hídricos disponibles en las zonas de estudio y describa los procesos para el conocimiento y control de redes y consumos, así como en el desarrollo de soluciones basadas en la naturaleza (NBS) para la retención de contaminantes. Está liderado por NILSA.
Por último, dos casos piloto se centran en el clima, ambos en la zona de Irati, ante el reto de disponer de información climática detallada, actualizada, procesada y accesible para todos los actores de los Pirineos. El primero de ellos analiza el impacto del fenómeno del calentamiento dependiente de la elevación en las condiciones de la nieve, los ecosistemas sensibles y los incendios forestales y en praderas; el segundo consiste en el cálculo de índices climáticos previstos para lugares específicos o sensibles, como estaciones de esquí, ecosistemas vulnerables (lagos, glaciares), bosques... Ambos están liderados por el Servei Meteorològic de Catalunya, Météo France y el Instituto Pirenaico de Ecología (IPE-CSIC) con la colaboración de AEMET.
Sobre la EPiCC
PYRENEES4CLIMA servirá para desplegar la Estrategia Pirenaica de Cambio Climático (EPiCC), la primera de su clase en Europa. Se trata de una estrategia transfronteriza de cambio climático liderada por los siete territorios pirenaicos, que pertenecen a tres países distintos, y está co-diseñada en cooperación para una biorregión de montaña específica.