La huelga parcial convocada en el Transporte Urbano Comarcal (TUC) de Pamplona ha generado este jueves ligeros retrasos en la salida de los autobuses desde las instalaciones de Moventis TCC. La empresa ha informado de que los servicios mínimos, fijados en un 60% entre las 06:00 y las 08:30 horas, han comenzado a operar con demoras, aunque se prevé que el servicio recupere la normalidad en torno a las 10:00 horas.
A la espera de lo que ocurra esta mañana de jueves, el comité de empresa valoraba «muy positivamente» el seguimiento de la primera jornada de huelga, celebrada el pasado martes, asegurando que «casi el 100% de la plantilla ha ejercido su derecho a huelga» en defensa de un convenio colectivo que garantice mejores condiciones laborales y un servicio de mayor calidad.
En un comunicado, los representantes sindicales pidieron disculpas a la ciudadanía por las molestias ocasionadas y han agradecido su comprensión. Asimismo, han instado tanto a la empresa TCC Moventis como a la Mancomunidad de la Comarca de Pamplona (MCP) a comprometerse «de forma sincera» en la búsqueda de soluciones para mejorar tanto las condiciones laborales como el mantenimiento de la flota, un problema que, según denuncian, llevan años arrastrando.
El comité también ha manifestado su «total indignación» ante un comunicado emitido por la empresa, en el que se vinculan las mejoras en los tiempos de expedición con la negociación del convenio. Los trabajadores han criticado que «ampliar el número de autobuses en algunas líneas se quiera presentar como una cesión de la empresa para mejorar nuestras condiciones laborales», cuando, a su juicio, se trata de una respuesta a la creciente demanda del servicio.
En este sentido, han denunciado que la plantilla ha estado sometida a una sobrecarga de trabajo, con líneas en las que «no se descansaba nada en toda la jornada» y relevos que se producían con retrasos de entre 15 y 20 minutos. Han señalado además que la ampliación del servicio beneficia principalmente a TCC, que percibe los ingresos correspondientes y evita posibles sanciones por incumplimientos en la frecuencia de las líneas.
Por último, el comité ha subrayado que el transporte urbano comarcal «pertenece a la ciudadanía» y han reivindicado un modelo de gestión que priorice la calidad del servicio y las condiciones de la plantilla por encima del beneficio empresarial.
